Dennis Nash, padre soltero y recientemente desempleado, antiguo trabajador de la construcción en Orlando (Florida), es desahuciado junto con su madre Lynn, peluquera, y su hijo pequeño Connor de la casa embargada que comparten. El operador inmobiliario Rick Carver es el encargado del desalojo, y los agentes de policía que se encargan de la ejecución le llaman "jefe". Dennis y su familia se mudan a una habitación de motel destartalada y estrecha. Dennis va a la oficina de Rick e intenta recuperar las herramientas que le han robado los hombres de Rick. Rick ve el enfrentamiento y queda impresionado por la valentía de Dennis. Le ofrece a Dennis trabajo como reparador en sus propiedades y Dennis acepta. Dennis pronto se convierte en el ayudante de Rick, ayudando a llevar a cabo los desalojos él mismo y aprendiendo rápidamente los esquemas inmobiliarios que se aprovechan de las normas gubernamentales y bancarias en perjuicio de los propietarios en apuros. Se revela que Rick y Dennis tienen antecedentes similares y, habiendo visto cómo su padre trabajaba duro sin recompensa y viendo cómo el sistema está en contra del hombre común, Rick piensa que es mejor ser el cazador que el cazado. Dennis se lleva una parte del trabajo que realiza para Rick y se sumerge en el glamuroso estilo de vida en el que se complace Rick. En sus rondas se encuentra con el padre del mejor amigo de su hijo, pero el hombre se vuelve hostil hacia Dennis al ver que forma parte del negocio de desahucios de Rick. Dice que el desahucio es ilegal y que lo combatirá en los tribunales.

Casi tan pronto como empieza a trabajar para Rick, Dennis le dice que se quede con los cheques que Rick le ofrece como pago, para poder comprar de nuevo la casa de la que fue desahuciado. Rick le advierte que no se ponga sentimental con los bienes inmuebles y le dice que se quede con el dinero por ahora, ya que no es suficiente para volver a comprar la casa. Sin embargo, llegan a un acuerdo con Rick para comprar de nuevo la antigua casa de su familia, pero el proceso legal les impide mudarse inmediatamente. No obstante, sorprende a su madre y a su hijo, mostrándoles la casa y diciéndoles que volverán a mudarse.

Mientras tanto, un propietario desahuciado que vive en el mismo motel que Dennis y su familia lo reconoce y lo amenaza. Él niega conocer al hombre, pero su madre y su hijo sospechan de cómo está ganando dinero. Habiendo sido testigo de las llamadas maliciosas que Rick recibe a menudo, decide mudarse inmediatamente de la habitación del motel vendiendo la casa familiar y comprando en su lugar una casa mucho más lujosa.

Cuando Dennis lleva a su madre y a su hijo a la lujosa casa y les informa de que la ha comprado y que ha vendido su antigua casa para poder salir inmediatamente de la habitación del motel, su madre no cree al principio que haya comprado la casa. Entonces, la madre de Dennis se sorprende por la pérdida de su antiguo hogar y se siente repelida al darse cuenta de que Dennis consiguió su nueva riqueza ayudando a Rick a victimizar a propietarios vulnerables que tienen problemas financieros. Connor también está descontento con el acuerdo y se pone del lado de su abuela cuando dejan a Dennis para quedarse con su hermano.

Rick prepara un acuerdo inmobiliario multimillonario, pero éste se ve amenazado por un caso legal presentado por un propietario (el padre del mejor amigo de Connor) al que intenta desalojar. El acuerdo está a punto de fracasar si el dueño de la casa gana, ya que afirma que no hay un conjunto completo de documentos para desalojarlo. Rick falsifica el documento y encarga a Dennis que lo entregue al tribunal, lo que le pone en un dilema moral. Finalmente, Dennis obedece la orden de Rick de entregar el documento que falta en el juzgado y que derrota el caso legal del propietario. El posterior desalojo se convierte en un enfrentamiento armado. Temiendo que el hombre, cuya familia también está en la casa, probablemente muera en un tiroteo, Dennis confiesa falsamente haber falsificado el documento. El dueño de la casa se rinde y Dennis es escoltado hasta el coche de las fuerzas del orden para que puedan hablar con Rick. A pesar de la aparente traición, Rick elogia sus acciones, y le agradece en voz baja; presumiblemente por asumir la culpa del documento falsificado. Mientras Dennis espera en el coche, el hijo del dueño de la casa le sonríe y luego huye rápidamente.