Ricky (Julian Dennison) es un delincuente juvenil de 12 años que ha saltado por hogares de acogida. Lo colocan en el campo con Bella (Rima Te Wiata) y su esposo Heck (Sam Neill). Finalmente comienza a adaptarse, pero Bella muere repentinamente, por lo que Ricky debe ser reubicado. Él suplica quedarse con Heck, pero no quiere cuidarlo, y la ley no le permite tener un tutor masculino.

Él huye al bosque. Heck lo encuentra pero se fractura la pierna después de intentar correr hacia Ricky por burlarse de él por ser analfabeto. Acampan en el bosque durante cinco semanas mientras él se recupera ya que Ricky no puede encontrar el camino de regreso. Mientras tanto, como no le han contado a nadie lo que ha sucedido, ha comenzado una cacería humana para ellos.

La cacería humana dura al menos cinco meses, ya que debido a malentendidos, creen que Heck ha secuestrado y abusado de Ricky. Como Heck tiene antecedentes, cree que no recibirá un juicio imparcial.

Finalmente, son perseguidos en un camión y atrapados. Heck entra en prisión preventiva, y Ricky es atendido por una familia con la que se encontró durante la cacería humana. Cuando liberan a Heck, Ricky lo visita y le pide que se quede con la familia, y la película termina con ellos buscando el raro pájaro Hula, que vieron durante la cacería pero no tenían cámara.