Final de A nuestros amores
(1983)Final de A nuestros amores (1983)
Título original: À nos amours
Sinopsis
Suzanne es una joven de quince años que, a pesar de su edad, tiene una vida sexual muy activa, pero sus relaciones con los chicos no van más allá del sexo. Su ambiente familiar no es armónico: tiene una madre neurótica, un padre al que no le gusta su manera de ser y un hermano que la golpea.
Maurice Pialat
Director
Jacques Loiseleux
Fotógrafo
Daniel Toscan du Plantier
Productor
Reparto principal
Sandrine Bonnaire
Evelyne Ker
Maurice Pialat
Dominique Besnehard
Anne-Sophie Maillé
Pierre-Loup Rajot
Como acaba A nuestros amores
Suzanne, una chica parisina de 15 años, vive con su volátil y abusiva familia: sus padres peleteros y su hermano mayor Robert, un escritor. Sale con un chico llamado Luc, que se queja de no verla tanto como le gustaría. En un café, Suzanne se relaciona con marineros y un visitante americano. Ella y el americano salen al aire libre y tienen relaciones sexuales, aunque la experiencia la deja abatida. Le dice a una amiga que lamenta su infidelidad a Luc, pero rompe con él y se vuelve cada vez más promiscua. Su padre está cerca de Suzanne, pero reacciona con recelo y violencia cuando ésta tiene una cita doble con su prima Solange. Cuando Suzanne regresa, su padre se muestra preocupado por su cambio de comportamiento, diciendo que sonríe menos y parece cada vez más aburrida. También le revela que ha encontrado a otra mujer y que está planeando abandonar la familia.
Varios días después, Robert le dice a Suzanne que su padre se ha marchado, y Robert asume la dirección de la casa. Suzanne continúa con sus aventuras, aunque admite que es incapaz de sentir amor. Su madre se siente desesperadamente infeliz y se siente cada vez más frustrada por la escasa ropa de Suzanne, sus cartas de chicos y su actitud en casa. Su hermano y su madre golpean a Suzanne durante las discusiones familiares. Luc vuelve con Suzanne y le pide que reanude su relación; ella se niega. Desgraciada, Suzanne pide a Robert que la envíe a un internado, diciendo que ya no puede tolerar la vida en casa y que ha contemplado el suicidio. Dice que sólo es feliz cuando está con un hombre; Robert se declara incapaz de entenderlo.
De vuelta a París, Suzanne comienza una relación más seria con un joven llamado Jean-Pierre. Aunque sigue diciendo que es incapaz de sentir amor, se compromete. Luc reaparece y le ruega que cancele la boda. Aunque ella confiesa que ha pensado en hacerlo, le dice que Jean-Pierre le proporciona por primera vez paz interior. En una cena de celebración, el padre aparece inesperadamente, cuestionando la felicidad de la familia y revelando que Suzanne ha estado visitándolo. Más tarde, aparece para ver cómo Suzanne se marcha de luna de miel, pero con otro hombre, dejando atrás a Jean-Pierre.