En 1967, Joanna Drayton, una mujer blanca de 23 años, regresa de sus vacaciones en Hawai a la casa de sus padres en San Francisco con el Dr. John Prentice, un viudo negro de 37 años. La pareja se compromete tras un romance relámpago de 10 días. Los padres de Joanna son Matt Drayton, un exitoso editor de periódicos, y su esposa, Christina, propietaria de una galería de arte. Aunque ambos Drayton son de mentalidad liberal, al principio les sorprende que su hija esté comprometida con un hombre de otra raza. Christina acepta poco a poco la situación, pero Matt se opone por la probable infelicidad y los problemas aparentemente insuperables a los que se enfrentará la pareja en la cultura americana.

Sin decírselo a Joanna, John les dice a los Drayton que se retirará de la relación a menos que los dos Drayton den su bendición a la pareja. Para complicar las cosas, John tiene previsto volar a Nueva York esa misma noche y después a Ginebra, Suiza, para trabajar durante tres meses en la Organización Mundial de la Salud. La respuesta de los Drayton, por tanto, determinará si Joanna le seguirá. Tillie, el ama de llaves negra de los Drayton, que sospecha de los motivos de John y protege a Joanna, acorrala en privado a John y le dice lo que piensa. Para sorpresa de John, Joanna invita a los padres de John a volar desde Los Ángeles para cenar con ellos esa noche. John no les ha dicho que su prometida es blanca. Monseñor Ryan, compañero de golf de Matt, llega después de que éste haya cancelado su partida. Le dice a Matt y a la pareja que apoya el compromiso. Pero Matt no cede. Christina le dice a Matt que ella también apoya a Joanna, incluso si eso significa luchar contra Matt. De camino al aeropuerto para reunirse con los padres de John, la pareja se detiene a tomar una copa con una vieja amiga de Joanna y su marido; ellos también la apoyan completamente. Mientras están en el club, escuchan a una cantante (Jacqueline Fontaine, sin acreditar) interpretar "The Glory of Love", un éxito de 1936 de Benny Goodman.

Llegan los padres de John, los Prentice. Ellos también se sorprenden al descubrir que Joanna es blanca. En la casa de los Drayton, se producen varias conversaciones privadas entre las dos familias. Todos coinciden en que se necesita más tiempo para asimilar la situación. Las dos madres se reúnen y coinciden en que se trata de un acontecimiento inesperado, pero apoyan a sus hijos. Los dos padres se reúnen, y ambos expresan su desaprobación ante esta infeliz ocasión. Monseñor aconseja a John que no se retire, a pesar de las objeciones de Matt. La madre de John le dice que tanto ella como Christina lo aprueban. John y su padre hablan de sus diferencias generacionales. La madre de John le dice a Matt que él y su marido han olvidado lo que era enamorarse y que su incapacidad para recordar el verdadero romance ha nublado su pensamiento. John regaña a Matt por no tener las "agallas" de decirle cara a cara que desaprueba el matrimonio. Finalmente, Matt revela su decisión sobre el compromiso a todo el grupo. En su discurso, Joanna se entera por primera vez de que John condicionó su matrimonio a la aprobación de los Drayton. Al final, Matt concluye, después de haber escuchado a la madre de John, que sí recuerda lo que es el verdadero romance. Dice que, aunque la pareja se enfrenta a enormes problemas debido a sus diferencias raciales, deben encontrar una manera de superarlos, y que aprobará el matrimonio, sabiendo todo el tiempo que no tenía derecho a impedirlo. Las familias y Monseñor se dirigen entonces al comedor para cenar.