La película contiene cinco líneas argumentales, cada una de las cuales se presenta de forma no cronológica. Algunos acontecimientos se muestran varias veces desde distintas perspectivas. Un joven árabe israelí, Nasri, que vive en el barrio de Ajami, en Jaffa, narra la película.

En la primera historia, el vecino de Nasri -un adolescente- es asesinado por un conocido clan beduino en un tiroteo mientras trabajaba en su coche. Nasri explica que el objetivo era su hermano mayor Omar, que había vendido el coche al vecino. El golpe fallido fue una venganza por la pérdida de uno de los miembros del clan beduino, que fue disparado y paralizado por el tío de Nasri en una disputa. Nasri y su hermana pequeña son enviados a Jerusalén, mientras que Omar, su madre y su abuelo se quedan. Temiendo por la seguridad de su familia, Omar busca la protección y la orientación de Abu Elias, un acaudalado propietario de un restaurante y miembro muy conocido y respetado de la comunidad de Jaffa. Abu Elias organiza un alto el fuego de tres días y contrata a un abogado para que represente a Omar en el tribunal tribal. Durante este tiempo, Nasri y su hermana regresan a casa. Al término de la sesión judicial, el juez declara que Omar debe pagar decenas de miles de dinares -el equivalente a decenas de miles de dólares estadounidenses- para que se restablezca la paz. A Omar se le da un plazo de tres semanas para hacer efectivo el pago. Omar y su amigo Shaata intentan cometer pequeños delitos para conseguir los fondos, pero no consiguen reunir suficiente dinero. La madre de Omar intenta convencerle de que se escape con la familia, pero Omar se niega a marcharse, creyendo que no hay lugar al que huir.

La segunda historia presenta a un joven adolescente llamado Malek que vive en el territorio palestino de Nablus. Malek está empleado ilegalmente en el restaurante de Abu Elias, y trabaja por desesperación para ganar suficiente dinero para la operación de trasplante de médula ósea de su madre enferma. Malek es amigo de Omar, que también se ha convertido en un empleado reciente del restaurante. También se revela que Omar, un musulmán, está enamorado de Hadir, la hija de Abu Elias, una cristiana. Abu Elias, una vez que descubre a la pareja secreta más adelante en la película al pillarlos en el acto subrepticio de flirteo, no aprueba su relación, y despide airadamente a Omar, advirtiéndole que se aleje de su hija.

La tercera historia muestra un breve pero violento encuentro entre un anciano judío y sus tres jóvenes vecinos árabes traficantes de drogas. La disputa comienza cuando el judío se queja a los jóvenes de que no ha podido dormir, debido a que sus ovejas balando lo mantienen despierto toda la noche. El desacuerdo no tarda en agravarse y uno de los jóvenes apuñala mortalmente al judío. Los tres jóvenes se esconden antes de que llegue la policía. Entre los policías que llegan al lugar se encuentra un oficial israelí llamado Dan, apodado Dando por sus amigos. Los espectadores se enteran de que el hermano menor de Dando, Yoni, ha desaparecido durante su servicio en las Fuerzas de Defensa israelíes. Mientras circulan rumores de que Yoni puede haber huido y se ha vuelto muy religioso, la familia de Dando -la madre y el padre específicamente- sospechan que puede haber sido secuestrado o asesinado por una organización terrorista palestina. Dando -un hombre de familia con esposa e hijos- se mantiene fuerte para su familia, rota emocionalmente, mientras intentan localizar a su hermano. Más adelante en la historia, Dando es informado de que el ejército ha descubierto los restos de lo que se cree que es un soldado israelí asesinado en los territorios palestinos. Poco después se confirma que los restos son de Yoni, y Dando, emocionalmente traumatizado, jura encontrar al asesino y llevarlo ante la justicia.

En la cuarta historia, los espectadores conocen al personaje Binj (interpretado por el codirector Scandar Copti), un excéntrico cocinero que trabaja en el restaurante de Abu Elias. También es muy amigo de Omar, Shaata y Malek. Binj está enamorado de una chica judía de Tel Aviv y está pensando en irse a vivir con ella, para consternación de su grupo de amigos. Se revela que el hermano de Binj fue uno de los tres implicados en el apuñalamiento del judío en Jaffa. Tanto Binj como su padre son detenidos e interrogados por la policía. Tras ser liberado, Binj acepta a regañadientes una gran cantidad de droga que pertenece a su hermano, que sigue huido. Una mañana temprano, tras una reunión social en su casa, Binj despierta a Malek para que no llegue tarde a la inauguración del restaurante y esconde en su presencia el ladrillo de droga. Justo cuando Malek se va, ve a tres hombres que hablan hebreo entrar en la casa de Binj. Cuando Binj aparece muerto en su apartamento poco después, Malek y Omar sospechan inicialmente que ha sido asesinado por un grupo de traficantes de drogas israelíes. Más tarde se revela que esos tres hombres eran en realidad policías que vinieron a registrar la casa de Binj y a intimidarlo para que revelara la ubicación de su hermano. Al tener que marcharse después de que no les dijera nada, la policía le promete a Binj que volverá. Binj, cansado de la situación y molesto por el continuo acoso de la policía, se deshace de la mayor parte de la droga, pone azúcar en polvo dentro de paquetes que imitan ladrillos de droga y los esconde por toda la casa en un intento de burlarse de la policía, en caso de que vuelvan. Binj procede entonces a esnifar el resto de las drogas que no desechó y muere accidentalmente de una sobredosis. Todo esto no lo saben Malek y Omar, quienes, tras la muerte de Binj, cogen uno de los paquetes de droga escondidos y, pensando que es la droga, deciden venderlo a un traficante para intentar pagar sus respectivas deudas. Abu Elias se entera de sus planes y avisa a la policía, pensando que Omar será atrapado, lo que pondrá fin a la relación entre Omar y su hija. En un principio, Abu Elias despide a Malek tras enterarse de su relación con las drogas, pero tras las súplicas de Malek y después de saber que Omar no irá solo al intercambio, cambia de opinión y ordena a Malek que se reúna con los traficantes con Omar, pero le advierte que no lleve la droga encima. Le asegura a Malek que, una vez que Omar sea detenido por la policía, Malek podrá volver al restaurante y que su madre enferma será atendida. Sin embargo, al igual que Omar y Malek, Abu Elias no se da cuenta de que las drogas son falsas.

La quinta historia muestra el encuentro entre Omar, Malek y los traficantes de drogas. Hacia el principio de la película, se muestra al espectador la escena, y al principio se le hace creer que Malek fue asesinado a tiros por los traficantes, una vez que descubrieron que las drogas eran falsas. Sin embargo, más tarde se revela que los traficantes eran en realidad policías que ejecutaban una operación encubierta. También se revela que el hermano menor de Omar, Nasri, insistió en acompañar a Omar y Malek a la reunión, temiendo que le ocurriera algo malo a su hermano. Al llegar, Omar le dice a Nasri que se quede en el coche y, a instancias de Malek, deja también su pistola. En la reunión, la policía aborda y golpea a Omar y Malek después de descubrir que las drogas son falsas. Dando, que forma parte de la operación, ve a Malek con el reloj de bolsillo que pensaba regalar a Abu Elias. Dando cree que el reloj pertenecía a Yoni y, en un ataque de ira, golpea a Malek y le apunta con su pistola con la intención de asesinarlo. Sin embargo, Nasri, que no se había quedado en el coche como se le había ordenado, ve la pistola apuntando a Malek y dispara a Dando con la pistola de Omar. A continuación, Malek es abatido por otro agente. La película termina con Omar escapando por un callejón y volviendo al coche, sólo para descubrir que Nasri ha desaparecido.