La película comienza con el Genio convertido en persona, contándoles a sus hijos la historia.

La rata callejera conocida como Aladdin (Mena Masud) se encuentra con la princesa Jasmine (Naomi Scott) de Agrabah y se enamora de ella.

El visir del sultán, Jafar (Marwan Kenzari), quien convence a Aladdin para que entre en la Cueva de las Maravillas y recupere una lámpara mágica para su propio beneficio. Jafar pierde la lámpara cuando intenta matarlo, Aladdin descubre a un Genio que vive en la lámpara. El genio (Will Smith) se compromete a conceder a Aladdin tres deseos, ya que es su nuevo amo.

Aladdin usa su primer deseo, convertirse en un príncipe para que Jasmine pueda casarse con él.

Ella no está impresionada por sus intentos de cortejarla hasta que actúa como él mismo, y también usa un poco de magia para ayudar.

Jafar intenta matar a Aladdin de nuevo para obtener la lámpara, pero este termina exponiendo a Jafar al Sultán por quien realmente es.

El loro de Jafar, Iago, lo ayuda a escapar de la mazmorra, y más tarde le roba la lámpara a Aladdin y Jafar se convierte en el nuevo amo de el Genio.

Utiliza sus dos primeros deseos para convertirse en el nuevo sultán y luego ser el hechicero más poderoso del mundo. Trata de desterrar a Aladdin, pero con la ayuda de sus amigos, regresa a Agrabah y engaña a Jafar para que se convierta en un genio y así pueda tener el mismo poder, pero eso hace que se quede atrapado en su propia lámpara. Iago con él.

Aladdin usa su último deseo para liberar al Genio, y continúa su relación con la doncella de Jasmine, Dalia.

El sultán le pasa su lugar a Jasmine, y ella decide casarse con Aladdin.