Recuperándose del PTSD, el ex-fotógrafo de guerra Jack Zeller tiene su sesión regular con el psiquiatra Dr. Vogel. En otro lugar, la prometida de Jack, Claire, le compra a Jack una cámara de película antigua en una subasta y se la da como regalo de aniversario.

A pesar de su reticencia inicial a volver a fotografiar, Jack utiliza la cámara para tomar fotos de edificios y propiedades en la ciudad para Claire, que es agente inmobiliaria. Más tarde Jack deja diez rollos de película para ser revelados en un laboratorio comercial.

Esa noche, se produce un misterioso incendio en el laboratorio fotográfico. Mientras tanto, Claire sale a correr y tiene un encuentro espantoso con un pervertido acosador, del que le habla a Jack cuando regresa a casa.

Jack se encuentra con su amigo Walt en un bar para tomar una copa. Walt anima a Jack a abrazar su regreso a la fotografía.

Mientras ve las noticias con Claire, Jack se entera de que un chico se ha roto el cuello en un parque comunitario. Jack recuerda haber fotografiado ese mismo parque el día anterior.

Jack vuelve al laboratorio para recoger sus fotos. El gerente le cuenta a Jack sobre el incendio y le explica que todas las fotos de Jack de alguna manera salieron en blanco y negro.

Mientras revisa sus fotos en casa, Jack encuentra una foto del niño muerto en el parque. También encuentra fotos de un obrero de la construcción muerto, un niño muerto en una piscina local, y una mujer muerta en una casa.

Jack vuelve a visitar la obra. Un trabajador cae en picada de repente hacia su muerte, exactamente como aparece en la foto de Jack.

Jack va a la piscina comunitaria al día siguiente con Claire y su amiga agente inmobiliaria Shannon con la intención de evitar la muerte del chico. Jack experimenta visiones inquietantes de sí mismo tomando la foto y de un niño ensangrentado vadeando en el agua, pero finalmente se va sin incidentes. Más tarde, Claire le cuenta a Jack la noticia de que un chico se ahogó poco después de que se fueran.

Sin explicación, Jack muestra sus fotos a Walt para asegurarse de que no está viendo cosas. A pesar de estar medicado, Jack comienza a perder el tiempo y a experimentar alucinaciones que le hacen dudar de su cordura.

Jack va a la casa de la mujer muerta de la foto a tiempo para rescatarla de un incendio en su casa. La mujer, Elise Partridge, sobrevive. Sin embargo, la anciana madre de Elise muere en el incendio.

Jack investiga a Noah Straum, el anterior propietario de la cámara. Jack descubre que Straum coleccionaba recuerdos de asesinos en serie y que su cámara pertenecía originalmente a Charlie Hibbert, un hombre de familia desaparecido acusado de ser el infame Asesino de la Luna de Miel. La esposa de Charlie se quitó la vida delante de Charlie cuando descubrió a su hijo envenenado en una cabaña familiar.

Jack lleva la cámara al anticuario Bernard para que la examine. Bernard confirma que la cámara contiene piezas personalizadas, pero afirma que es incapaz de generar una exposición.

Después de revelar las fotos restantes de Jack, encuentra una foto de Elise Partridge, así como una que muestra a Claire muerta en el suelo fuera del restaurante Petermans. Jack llama a Claire para cancelar la cena de aniversario planeada en Petermans, pero descubre que ella ya está allí. Jack se apresura a ir al restaurante y convence a Claire de que se vaya con él inmediatamente. Un asaltante se enfrenta a la pareja a punta de pistola en el aparcamiento. Jack le arroja el bolso de Claire al asaltante, provocando que éste dispare erradamente. Un vagabundo cercano es alcanzado por la bala y cae al suelo, aterrizando exactamente como Claire en la foto. El detective Dawson pregunta a Jack sobre el incidente mientras el detective Ford toma la declaración de Claire.

Jack ve que Claire aparece ahora atada a un banco de pesas en otra fotografía. Jack busca en la última dirección conocida de Charlie Hibbert y encuentra un búnker subterráneo que contiene un esqueleto y cintas de vídeo. Jack mira las cintas, que muestran a Charlie despotricando locamente sobre cómo detener un ciclo de muerte. Jack llega a la conclusión de que para salvar a alguien de una muerte anunciada, otra víctima debe morir en el lugar de esa persona.

Jack rastrea y captura al pervertido que acechó a Claire anteriormente y lo asesina según la foto del banco de pesas. La fotografía finalmente cambia para mostrar al hombre asesinado en lugar de Claire.

Una nueva fotografía muestra a Claire muerta en el vestíbulo de una propiedad vacía que está vendiendo. Cuando el dueño de la ferretería Tad pregunta a Jack sobre los suministros que está comprando, Jack mata a Tad después de una pelea brutal y lo coloca en la casa vacía según la fotografía. Claire encuentra el cuerpo mientras muestra la casa a los posibles compradores, lo que lleva a los detectives Dawson y Ford a interrogar a la pareja una vez más.

Claire se enfrenta a Jack sobre su cada vez más extraño comportamiento y su mentira. Mientras las imágenes inquietantes se intensifican, Jack compra un arma en una casa de empeños y descubre que una nueva fotografía muestra a Claire muerta en la bañera de otra propiedad vacía.

Jack recoge a una prostituta y la mata en la bañera de esa casa vacía. La amiga de Claire, Shannon, se topa con Jack después del acto, obligándolo a matarla también.

Las visiones violentas siguen persiguiendo a Jack. Encuentra una foto final que muestra a Claire amordazada en un almacén y se prepara para un último asesinato para salvar su vida.

Los detectives Dawson y Ford llevan a Jack a la comisaría para interrogarlo. Sin ninguna prueba para retenerlo, el teniente Vincent obliga a los detectives a dejar ir a Jack.

Después de que Jack se va, el encargado del laboratorio fotográfico viene a la comisaría para informar de las extrañas fotos de Jack, poniendo a Dawson y Ford tras Jack una vez más. Dawson y Ford encuentran la última foto de Claire mientras registran la casa de Jack y corren al almacén.

Incapaz de encontrar a un vagabundo para matar, Jack ordena una pizza para ser entregada en el almacén. Jack toma al repartidor a punta de pistola, sólo para descubrir que el conductor es su amigo Walt. Jack se prepara para disparar a Walt de todas formas, pero se aleja cuando oye un disparo a lo lejos.

Jack se apresura a otra parte del almacén donde encuentra a Claire muerta como se muestra en la fotografía. Sosteniendo un arma sobre ella está Charlie Hibbert. Charlie dice, "esto tenía que acabar con Jack". Jack se derrumba en el suelo junto al cuerpo de Claire mientras se oyen sirenas que se acercan desde la distancia.