Sarah y Josh (Katie Walder y Matt Passmore) son una pareja que vive en los suburbios. Ella quiere tener un bebé y está estudiando un posgrado. Él trabaja como crupier en un casino y le oculta a su mujer que es estéril. Tienen un vecino espeluznante, Dale (Nathan Keyes), que vive en. Al principio de la película, se ve a un Dale adolescente con su conejito de compañía escuchando cómo sus padres se pelean y su padre acaba matando a su madre. Al final, la madre de Dale revive milagrosamente.

Sarah se entera por la madre de Dale de que él la devolvió a la vida después de que el padre de Dale la matara. La madre de Dale sabía que él estaba mal, porque seguía abusando/violando/matando a las chicas que le gustaban y luego las devolvía a la vida en lugar de aprender habilidades sociales, pero no se atrevía a matarlo, así que seguía intentando suicidarse. Dale seguía trayéndola de vuelta, así que se roció con gas y se prendió fuego delante de unos policías con la esperanza de morir o ser internada (que es donde Sarah la encontró: una institución).

Sarah descubre que Dale ha estado violándola, asesinándola y devolviéndola a la vida. En el transcurso de esto la dejó embarazada (su marido Josh es estéril, así que pensó que la estaba engañando) y ella y su amiga Leslie (Laura Gordon) descubren que él también le había estado haciendo esto a Leslie hasta que ella consiguió un perro y el bebé que está teniendo es en realidad de Dale. Cuando Leslie tiene el bebé y no es negro o asiático como ella pensaba que sería (hacen una broma sobre esto al principio de la película) es caucásico y más tarde descubrimos lo que Dale ha hecho.