Anna Gardner, una estudiante británica de intercambio que asiste a la universidad en Los Ángeles, conoce y se enamora de Jacob Helm, un estudiante estadounidense que le corresponde. Tras su graduación, Anna decide pasar el verano con Jacob en lugar de regresar al Reino Unido, sin saber las consecuencias de haber sobrepasado su visado de estudiante, que expiró al graduarse. Tras regresar a Londres para un compromiso familiar, Anna vuela de nuevo a Los Ángeles, donde los funcionarios de inmigración la detienen, le niegan la entrada y la deportan al Reino Unido.

A pesar de sus esfuerzos por apelar a la decisión de inmigración, Anna recibe la noticia de que se le prohíbe entrar en Estados Unidos. El amor de la pareja se vuelve más tenso por su separación y su relación a distancia. Jacob deja entonces su exitoso negocio de diseño y visita a Anna en Londres durante unas semanas tras llamarla una noche. Allí se entera de que los padres de Anna, Bernard y Jackie, han contratado a un abogado de inmigración para intentar que se levante la prohibición. Bernard sugiere que casarse podría ayudar a sus esfuerzos. Jacob se siente incómodo con la sugerencia y la pareja lucha contra sus sentimientos.

Cuando Jacob regresa a Estados Unidos, él y Anna se distancian, y Jacob empieza a salir con Samantha, una chica que está enamorada de él. Anna también intenta encontrar una nueva vida para sí misma, comenzando a trabajar como secretaria para una revista, pero es incapaz de abandonar sus sentimientos por Jacob. Más tarde, mientras Jacob está hablando con un cliente, le dice accidentalmente a "Anna" que coja el teléfono, a lo que Samantha responde. Anna acaba llamando a Jacob desde Londres, y ambos admiten que nunca encontrarán en los demás lo que encontraron en el otro y que deberían casarse. Jacob rompe entonces con Samantha, vuelve a Londres y se casa con Anna en una pequeña ceremonia en el registro civil con los padres de ella como testigos; Jacob y Anna afirman que "nunca permitirán que nada destruya los sentimientos que compartimos el uno por el otro". Con una despedida llena de lágrimas, Jacob vuelve a sus negocios en Los Ángeles mientras la pareja espera seis meses antes de recurrir la prohibición del visado de Anna.

Seis meses después, Jacob vuela de nuevo al Reino Unido para presentar el recurso, pero éste es rechazado. Con su relación comprometida y sin esperanza de resolver el problema del visado, Anna y Jacob empiezan a pelearse por celos y frustración. Jacob regresa a Estados Unidos y reanuda su relación con Samantha, mientras que Anna empieza a salir con Simon. Anna acaba siendo ascendida en el trabajo al puesto de editora, algo por lo que había estado trabajando. Su vida amorosa, sin embargo, no es tan positiva ni satisfactoria: se da cuenta de que Simon no le provoca los mismos sentimientos que Jacob, a quien sigue echando de menos.

Algún tiempo después, a Anna le ofrecen por fin un nuevo visado. Anna invita a sus padres a cenar para que conozcan a Simon, que acaba por no gustarles. Después, Simon le propone matrimonio a Anna, que lo rechaza. Deja su trabajo, su novio y su apartamento y vuela a Los Ángeles con Jacob, que la recibe con flores en el aeropuerto, donde tienen un incómodo reencuentro. Jacob lleva a Anna a su casa, donde se reúne con ella en la ducha. Mientras el agua cae sobre ellos, recuerdan los recuerdos más felices que tuvieron juntos al principio de su relación, que ahora se ha vuelto tensa debido a sus indiscreciones durante el tiempo que pasaron separados.