El taxista neoyorquino Jerry Fletcher (Mel Gibson), teórico de la conspiración, expone continuamente sus ideas a Alice Sutton (Julia Roberts), una abogada del Departamento de Justicia. Ella le sigue la corriente porque una vez la salvó de un atraco, pero no sabe que la espía en su casa. Su propio trabajo es resolver el misterio del asesinato de su padre (Bert Remsen). Al ver actividad sospechosa por todas partes, Jerry identifica a unos hombres como trabajadores de la CIA, los sigue hasta un edificio y es capturado. El interrogador inyecta a un Jerry en silla de ruedas con LSD y lo interroga utilizando la tortura. Jerry experimenta terroríficas alucinaciones y flashbacks, entra en pánico y consigue escapar incapacitando al interrogador mordiéndole la nariz y dándole patadas.

Más tarde, tras ser capturado de nuevo, Jerry es esposado a la cama de un hospital y obligado a caer en un sueño inducido por las drogas. Alice la visita y Jerry la convence de que cambie su ficha con el criminal de la cama de al lado o estará muerto por la mañana. Cuando Alice regresa al día siguiente, el criminal está muerto, supuestamente de un ataque al corazón. La CIA, el FBI y otras agencias están allí, dirigidas por el psiquiatra de la CIA, el Dr. Jonas (Patrick Stewart), cuya nariz está vendada. Mientras tanto, Jerry finge un ataque al corazón y, con la ayuda de Alice, escapa de nuevo y más tarde se esconde en el coche de Alice. Mientras Alice y el agente del FBI Lowry (Cylk Cozart) examinan los objetos personales de Jerry, la CIA llega y confisca todo. Ella rechaza la oferta de Lowry de trabajar con ella, y más tarde encuentra a Jerry escondido en su coche. Salen del hospital y, de camino al apartamento de Jerry, éste le explica que probablemente alguien la esté siguiendo. Siguiendo las instrucciones de Jerry, Alice cambia de carril y descubre que ese alguien es Lowry, al que consiguen perder la pista. Entran en el apartamento de Jerry, bien protegido, donde él le habla del boletín de conspiración que produce.

Justo cuando Alice ha decidido que Jerry está loco, irrumpe un equipo SWAT. Jerry prende fuego a todo y salen por su elaborada salida secreta con trampilla. En la habitación de abajo, hay un gran mural en la pared, en el que aparecen tanto Alice en su caballo como las triples chimeneas de una fábrica. Como el apartamento de Jerry está en llamas, Jerry y Alice escapan, con Jerry disfrazado de bombero para evitar sospechas. La pareja va al apartamento de ella, donde Jerry revela accidentalmente que la había estado vigilando. Al escuchar esto, Alice lo echa de su apartamento. En la calle de abajo, Jerry se enfrenta a Lowry y a su compañero que están vigilando su casa, y les advierte a punta de pistola que no le hagan daño. Después de ser rastreado hasta una librería, Jerry ve a los agentes bajando en rappel desde helicópteros negros y se esconde en un teatro, escapando al provocar el pánico al decir "¡Bomba!".

Alice llama a cada una de las personas de la lista de correo del boletín de Jerry y descubre que todas han muerto recientemente, excepto una. Jerry utiliza una treta para sacarla de la oficina y luego inmoviliza a los agentes que la vigilan. Durante su huida, él le dice que se enamoró de ella a primera vista, y luego huye en un tren subterráneo cuando ella desprecia sus sentimientos. Ella va a ver a la última persona superviviente de la lista de suscriptores y descubre que es Jonas. Éste le cuenta que a Jerry le lavaron el cerebro con técnicas desarrolladas por el Dr. Jonas en el Proyecto MKUltra para convertirse en un asesino y que fue robado por otra parte, que sólo Jerry puede identificar. También afirma que Jerry mató a su padre. Acepta ayudar a encontrar a Jerry, que le envía un mensaje para que se reúna con él. Él se deshace de los agentes que les siguen con un traslado en coche previamente acordado, y la lleva a los establos privados de caballos de su padre en Connecticut. Mientras tanto, Alice llama en secreto a su oficina para que Jonas pueda rastrear su teléfono. En los establos, Jerry recuerda que fue enviado a matar a su padre, pero descubrió que no podía y que en su lugar se había convertido en su amigo. Jerry le dice a Alice que le había prometido velar por ella antes de que el juez fuera asesinado por otro asesino. Los hombres de Jonas capturan a Jerry, matan a su superior jerárquico e intentan matarla o capturarla sin éxito.

Tras escapar, Alice lleva a Lowry a las oficinas donde conoció a Jonas, que encuentran despejadas. Entonces le obliga a punta de pistola a admitir que no es del FBI, sino de una "agencia secreta que vigila a las demás agencias". Dice que han estado utilizando al involuntario Jerry para descubrir y detener a Jonas. Alice va al lugar de las chimeneas del mural de Jerry y ve un hospital psiquiátrico al lado. Allí escucha y habla con Jerry a través de un conducto de ventilación, y un empleado al que había sobornado le muestra un ala no utilizada. Entra y encuentra a Jerry. Mientras Jonas los atrapa, Lowry llega con sus hombres y ataca a los de Jonas. Jerry intenta ahogar a Jonas, pero éste le dispara desde el agua. Alice, que ha recuperado la conciencia después de haber sido noqueada, dispara entonces a Jonas seis veces. Tras matar a Jonas, Alice le dice a Jerry que le quiere antes de que se lo lleven en una ambulancia. Tiempo después, una afligida Alice visita la tumba de Jerry y le deja un alfiler que él le había regalado. Vuelve a montar su caballo que había dejado de montar después del asesinato de su padre. Mientras observa a Alice desde un coche con Lowry, Jerry mantiene su acuerdo de no contactar con ella hasta que todos los otros sujetos de Jonas sean capturados. Mientras se alejan cantando "Can't Take My Eyes Off You", Alice encuentra el alfiler que había dejado en la "tumba" de Jerry atado a su montura, y sonríe mientras sigue montando.