En el Illinois de 1917, justo antes de que los Estados Unidos se unan a la Primera Guerra Mundial, se ha planeado una feria para recaudar dinero para apoyar a Gray Maturin y Larry Darrell, que se unen a la guerra en Europa como conductores de ambulancias. Larry está deseando volver a casa para casarse con su novia de toda la vida, Isabel. Larry comparte una última noche con Isabel viendo los fuegos artificiales junto a Gray, su íntima amiga Sophie y su marido Bob.

En el frente, el oficial al mando Piedmont instruye a sus nuevos hombres en la dura realidad de la guerra. Por ejemplo, hace que los dos vayan armados, porque a pesar de ser una unidad de ambulancias y de la neutralidad de Estados Unidos, el enemigo puede matar y matará a los que ayuden a los aliados. También destruye los faros y las ventanillas de un camión ambulancia compañero porque las luces señalarán a los enemigos a su unidad. Larry se adapta rápidamente, disparando a los faros y ventanas de su propio camión.

Larry es testigo de la muerte de soldados y compañeros conductores de ambulancias, y está en constante peligro. Cuando Estados Unidos está metido de lleno en la guerra, la unidad de Larry se queda con unos pocos hombres. Durante un encuentro inesperado con soldados alemanes, Piedmont es apuñalado mortalmente al intentar impedir que un soldado alemán dispare a un Larry herido. La guerra termina poco después, y cuando Gray y él regresan a Estados Unidos, Larry sufre el sentimiento de culpa del superviviente y se da cuenta de que su vida ha cambiado. Sus planes de unirse a Gray para trabajar para el padre de éste como corredor de bolsa no le harán feliz, por lo que aplaza su compromiso con Isabel y viaja a París en un esfuerzo por encontrar un sentido a su vida. El tío de Isabel, Elliott Templeton, le asegura que un tiempo en París ayudará a Larry a despejar su mente y a quitarle el miedo al matrimonio.

En lugar de seguir las sugerencias de Elliott de alojarse en hoteles de primera clase y cenar con la aristocracia, Larry vive una vida sencilla, leyendo libros de filosofía en un hotel barato. Encuentra trabajo, primero como empacador de pescado y luego como minero del carbón. Después de salvar la vida de un compañero de trabajo empujándolo fuera del camino de un vagón minero fuera de control, tiene una conversación sobre libros con el minero mayor. El minero habla del libro de un mago ruso, le presta un ejemplar de los Upanishads y le sugiere a Larry que viaje a la India para obtener una perspectiva diferente.

En la India, Larry se une a un monasterio budista. Como ejercicio, sube a la cima de una montaña nevada y medita en solitario. Tras quedarse sin leña, empieza a quemar los libros que ha traído consigo. Encuentra su sensación de paz interior. Un monje le hace saber que su viaje no ha terminado, que "el camino de la salvación es estrecho y tan difícil de recorrer como el filo de una navaja".

Al regresar a París, Larry se reencuentra con Elliott, quien le hace saber que muchas cosas han cambiado, especialmente que Isabel se ha casado con Gray. (Ella había terminado su relación con Larry tras un desastroso reencuentro en París, no mucho después de que él llegara por primera vez). Han tenido dos hijos. Gray e Isabel se vieron obligados a mudarse a la casa de Elliot en París después de que la Gran Depresión llevara a Gray a la quiebra. Su espíritu también quedó destrozado cuando su padre se suicidó tras la crisis. Larry se entera de que, mientras él no estaba, Sophie perdió a Bob y a su hijo en un accidente de coche y se entregó al alcohol, al opio y a la prostitución.

Larry intenta inmediatamente reformar a Sophie y, tras un tiempo, se comprometen. Isabel insiste en que le comprará a Sophie un vestido de novia como regalo. Durante su conversación, Isabel admite que aún ama a Larry y condena a Sophie, tachándola de ser una carga para Larry. Se ve interrumpida por una llamada telefónica y deja a Sophie sola con una botella de licor.

Larry busca a Sophie y la encuentra en un fumadero de opio con su antiguo chulo. Tras un enfrentamiento, Larry se queda sangrando en la calle con un ojo morado, mientras Sophie se queda en el establecimiento. A la mañana siguiente, Larry es despertado por dos hombres en la puerta y llevado a la morgue para identificar el cuerpo de Sophie. Su garganta había sido cortada con una navaja. Larry se dirige entonces a la casa de Elliott para tratar de averiguar qué fue lo que ocurrió el día anterior. Elliott ha sufrido un derrame cerebral y le han dado la extremaunción. Larry se enfrenta a Isabel por lo sucedido y la obliga a admitir su papel en el regreso de Sophie a la botella. Ella le dice a Larry que lo que hizo no es diferente a que Larry arruinara su relación al huir para encontrar el sentido de su "maldita vida", pero admite que aún lo ama y que no quería que nadie (incluida Sophie) lo lastimara como ella, Isabel, había sido lastimada cuando Larry la dejó por la guerra.

Antes de que Larry pueda responder, son interrumpidos por los últimos momentos de la vida de Elliott. Larry hace una buena obra para Elliott al convencerle de que los aristócratas parisinos no se han olvidado de él. (Había estado esperando una invitación a una fiesta de disfraces organizada por una princesa francesa). Tras la muerte de Elliott, Larry consuela a la desconsolada Isabel. Admite que su viaje consistía en intentar llevar una buena vida que le hiciera merecedor del sacrificio de Piamonte. Isabel y él se separan en términos razonables, y él se despide de ella y de Gray. Declara su intención de partir a casa, lo que provoca la pregunta "¿Dónde está el hogar?". Él responde: "América".