En Helsinki, Waldemar, un vendedor ambulante de camisas, tiene una discusión con su esposa y decide dejarla. Abandona su negocio y vende las camisas restantes. Decidido a cambiar su vida, Waldemar apuesta sus ganancias en un juego de póker y gana una gran cantidad de dinero. Con este dinero, compra un restaurante. Sin embargo, sus tres empleados se muestran inicialmente escépticos ante los intentos de Waldemar de revitalizar el restaurante.

La llegada de Khaled

Al mismo tiempo, Khaled, un sirio, llega ilegalmente a Helsinki en un barco de carga. Se entrega a la policía y solicita asilo. En el centro de procesamiento de refugiados al que lo envían, entabla amistad con Mazdak, un refugiado iraquí. Khaled le pide ayuda a Mazdak en su búsqueda de su hermana, Miriam, quien se perdió durante su travesía por los Balcanes en busca de refugio de la guerra civil siria. Sin embargo, cuando el gobierno deniega la solicitud de asilo de Khaled, él decide escapar.

El encuentro entre Waldemar y Khaled

Waldemar encuentra a Khaled escondido cerca de su restaurante y decide darle refugio, además de ofrecerle un empleo. Waldemar y su personal ayudan a Khaled a obtener nuevos documentos legales. Finalmente, Mazdak recibe noticias de Miriam. Con la intención de reunir a Khaled y Miriam, Waldemar y Khaled contratan a un camionero para que la traiga desde Lituania, donde se encontraba en un centro de refugiados. La emotiva reunión de Khaled y Miriam finalmente se hace realidad.

Un giro trágico

Sin embargo, la felicidad de Khaled se ve truncada cuando, al regresar al apartamento de Waldemar, es acosado por un matón racista que lo apuñala casi hasta la muerte. Al llegar a su hogar, Waldemar se encuentra con charcos de sangre y sale corriendo para encontrar a Khaled sentado bajo un árbol, en la orilla de un río, con una sonrisa mientras un pequeño perro lame su rostro.