Los policías, liderados por Tommy Flanigan, Dennis Gilley y Roy Bishop se infiltran en el club de White y matan a la mayoría de los guardaespaldas y equipo. D'Alessio (Calderón) se libra.

Cuando White y Jimmy Jump (Fishburne) entran en un coche, el policía se aferra a la puerta, con la que White mata el policía en una boca de incendios.

En la persecución siguiente, Jump y White se separan. Jump se esconde mientras Tommy lo llama, pero Jump golpea a Tommy cinco veces en el centro de la masa, perforando su chaleco antibalas, matándolo. Gilley se acerca por detrás de Jump, que se ríe alocadamente, y lo mata.

Al día siguiente, Frank White va en coche al funeral de Tommy y mata a Gilley, en un tiroteo desde un coche. Esto hace que Frank visite el apartamento de Roy y explique sus motivos para hacerse cargo del tráfico de drogas.

Le explica a Bishop que Artie Clay tenía un patrimonio de 13 millones de dólares en el momento de su muerte. Luego explica cómo Larry Wong tenía inquilinos viviendo en sus apartamentos para compartir un solo inodoro por 800 dólares al mes, y cómo el Rey Tito participó en la prostitución infantil.

Explica por qué mató a Emilio Zapa, y ofrece un contrato de 250.000 dólares por la cabeza cualquier policía que esté involucrado en el caso. Frank esposó a Roy a una silla, Roy le disparó a las esposas y se fue a perseguir a Frank.

Frank y Roy se encuentran en el metro, donde Frank toma una mujer como rehén. Frank entonces mata a Roy, no antes de recibir un disparo a cambio.

Frank se dirige a un taxi, ahí la policía de Nueva York se abalanza sobre Frank. Frank muere en el taxi.