Emily Benetto sólo quiere ser artista. Pero el lujo de ser artista en el mundo moderno no es algo que todos puedan permitirse. Así que, si Emily no puede permitirse ser lo que siempre ha soñado ser, ¿en qué se convertirá? En su decisión de elegir el arte puede haber influido su pasión durante la adolescencia, que puede haberla convencido de matricularse en una universidad de prestigio. Pidió algunos préstamos estudiantiles para pagar las tasas y estaba dispuesta a arriesgarse por el arte. Pero entonces tuvo lugar una tragedia por la que Emily no pudo terminar la universidad. Es una pintora apasionada, pero sin un título, no consigue un trabajo como artista. Esa es la ironía de su vida. La película de John Patton Ford "Emily the Criminal" explora temáticamente estas ironías a través de la historia de su protagonista. La narración también retrata las diversas dificultades, los rechazos y los sentimientos de descontento que empujan a un artista al límite y le obligan a hacer cosas en la vida que pueden no ser moralmente correctas, pero que acaban siendo necesarias para sobrevivir. Así que, sin más preámbulos, examinemos el punto de transformación en la vida de Emily que la convirtió de artista luchadora a criminal.

Trama de Emily la estafadora

Emily Benetto, originaria de Nueva Jersey, acudió a la HBS para cursar la carrera de letras. Sin embargo, en 2016 ocurrió un incidente inevitable, tras el cual tuvo que abandonar la universidad. Tenía una relación con un chico que probablemente se volvió tóxica, y una vez, durante una discusión, Emily le golpeó, tras lo cual él la denunció a la policía. Emily fue condenada por agresión con agravantes y tenía por delante un enorme préstamo estudiantil y gastos legales, además de una abuela que necesitaba apoyo. Debido a estas circunstancias, Emily no volvió a la universidad y decidió trabajar para pagar las facturas. Llegó a Los Ángeles con el sueño de conseguir un trabajo en la industria artística, pero a diferencia de su amiga de la infancia, Liz, Emily nunca tuvo esa suerte. Liz trabajaba en una agencia de publicidad y llevaba la vida que Emily anhelaba. Emily creía que Liz le concertaría una entrevista en su empresa, lo que suponía su última esperanza de abrirse camino en el sector.

Para sobrevivir en Los Ángeles, Emily trabaja como repartidora a tiempo parcial para una empresa de catering y vive en un piso compartido para ahorrar algo de dinero. Se presenta con ilusión a entrevistas en varias empresas, pero allá donde entra, se cuestiona su pasado de convicciones, y eso arruina sus perspectivas de conseguir un trabajo. Al comienzo de la película, Emily tiene que pagar una deuda estudiantil de unos 70.000 dólares, lo que la lleva a realizar más trabajos esporádicos para quitarse el préstamo de encima. En este momento de necesidad, un compañero de trabajo llamado Javier Santos le informa de un trabajo por el que puede ganar 200 dólares por trabajar como Dummy Shopper. Emily, con un poco de duda, se pone en contacto con estos turbios clientes y visita su tienda, donde conoce a los hermanos libaneses Youcef y Khalil Haddad. El hermano menor, Youcef, informa a la nueva hornada de empleados sobre su plan de fraude con tarjetas de crédito, en el que los compradores ficticios tienen que utilizar la tarjeta de crédito falsa que Youcef ha diseñado para comprar material del supermercado, que luego venden en el mercado negro.

Poco a poco, Emily pasa a formar parte de la red de Youcef y empieza a crear tarjetas de crédito falsas por su cuenta, con lo que gana una considerable cantidad de dinero con la que consigue pagar una parte de sus deudas. Sin embargo, hasta el final, Emily considera que esto es una actividad secundaria hasta que consiga un verdadero trabajo como artista, pero ese día nunca llega, convirtiendo así a Emily en una criminal de la que no hay vuelta atrás.

¿Cómo se convirtió Emily en una delincuente?

Youcef había pedido a Emily que comprara un coche de lujo a unos compradores con la ayuda de una tarjeta de crédito falsa y le había advertido que tenía que salir de su oficina en 8 minutos o descubrirían el fraude. Mientras Emily estaba a punto de salir de su aparcamiento, el propietario descubrió que Emily había utilizado una tarjeta de crédito falsa, por lo que intentó detenerla y la golpeó en la cara. Aquí, Emily había terminado el peligroso trabajo, pero al ver su cara magullada, Youcef tuvo que preguntar si podía ganar dinero de otra manera. La escena subraya brevemente el conflicto en la vida de Emily, evidentemente creado por sus circunstancias. Quiere ser artista pero no puede permitirse luchar. Es una buena pintora, pero nadie quiere contratarla debido a su condena (de la que puede o no ser totalmente culpable). Sin embargo, a diferencia de Youcef, que quiere comprar una propiedad con el dinero del fraude, Emily sólo quiere deshacerse de sus deudas estudiantiles para poder volver a algún colegio comunitario y terminar sus estudios o poder luchar por su pasión sin que el peso de esa deuda le preocupe.

El hermano de Youcef, Khalil, se sintió bastante envidioso de la inclinación romántica de Youcef hacia Emily y pudo percibir muy bien la codicia de Emily por conseguir una gran cantidad de dinero en poco tiempo. Emily estaba poniendo en peligro a los hermanos sin quererlo, por lo que Khalil decidió traicionar a su hermano. En la versión de Youcef de la historia, llegamos a saber que Khalil se negó a pagar a Youcef, por lo que no pudo pagar el anticipo del apartamento. Poco después, Youcef convenció a Emily para que limpiara el dinero de su oficina, sus cuentas bancarias y sus almacenes. La decisión de Youcef de robar a su hermano fue una declaración de guerra directa, pero Emily no estaba dispuesta a lanzarse al mundo del crimen sin pensar en sus consecuencias. Era un punto de no retorno, y Emily necesitaba un empujón para seguir adelante. Al día siguiente, tenía una entrevista en la agencia de publicidad de Liz, donde su jefe le ofreció unas prácticas no remuneradas durante 6 meses antes de pagarle nada por sus esfuerzos. Para una artista que luchaba con un enorme préstamo estudiantil y sobrevivía sola en Los Ángeles, un trabajo sin remuneración significaba literalmente una sentencia de muerte. La ira de Emily en ese momento le dio el empujón que necesitaba para pasar de artista a delincuente.

Final explicado de Emily la estafadora

¿Qué pasó con Emily, Khalil y Youcef?

Khalil ya había sacado el dinero de la oficina y de otros lugares antes de que Emily y Youcef pudieran robárselo. Por eso, sin otra opción, Emily convenció a Youcef para que se enfrentara a Khalil, que estaba escondido en un piso franco en Santa Clarita con unos matones armenios. Emily y Youcef engañaron a los matones y después fueron a por Khalil al dormitorio, donde éste atacó a Youcef e intentó matar a Emily. Sin embargo, Emily sacó una navaja de su bolsillo y apuñaló a Khalil en el estómago. En ese momento, intentó amenazar a Khalil para que le hablara del dinero que había robado de la oficina y de las cuentas bancarias, pero por un momento, Khalil negó haber robado dinero. Aquí se podría especular que fue Youcef quien vació el dinero de la cuenta bancaria y luego culpó de todo a Khalil para que Emily le ayudara a robar a su propio hermano. Podría haber tenido un plan siniestro para engañar también a Emily después del robo, pero resultó que la suerte no estaba de su lado esta vez.

Khalil le reveló a Emily que había algo de dinero en efectivo en la nevera (aunque nunca dijo que fuera el mismo dinero que le había robado a su hermano). Emily cogió rápidamente la bolsa llena de dinero y decidió dejársela a Youcef. Llevó a un Youcef sangrante a su coche, pero no pudo encontrar las llaves del mismo. Emily entró en pánico al oír las sirenas en las inmediaciones, por lo que decidió coger el dinero en efectivo y dejar a Youcef atrás. Al día siguiente, la policía de Los Ángeles hizo una redada en su apartamento para descubrir que había desaparecido.

La secuencia final de "Emily the Criminal" no nos revela el destino de los dos hermanos. Sin embargo, nos lleva a otro país, probablemente Sudamérica, donde Emily vive ahora una vida libre. En un momento de la película, Youcef le pregunta a Emily qué haría si tuviera dinero. Ella le dice que lo primero que haría sería pagar sus deudas (cosa que no creemos que pueda hacer teniendo en cuenta su situación en el clímax). Sin embargo, durante la misma secuencia, le dice a Youcef que sólo quiere ser libre y experimentar cosas y vivir en otro país durante un tiempo. Tenía una larga lista, y probablemente Emily la estaba tachando una por una. Más tarde, en la secuencia final, la encontramos pintando de nuevo sin la carga de su deuda. Sin embargo, la pintura se ha convertido probablemente en su actividad secundaria o quizás en un pasatiempo, y finalmente, su actividad secundaria se ha convertido en su trabajo a tiempo completo. En el plano final, vemos a Emily sentada frente a un grupo de personas y dándoles instrucciones sobre el fraude con tarjeta de crédito que están a punto de cometer. Emily no sólo ha cambiado de lugar con Youcef simbólicamente, sino que también se ha convertido en una delincuente a tiempo completo, donde hay poco margen para que un artista sobreviva. Sólo nos muestra que, una vez más, la codicia triunfa sobre el arte al final.