"Hermana muerte" es la precuela del drama español "Verónica" de 2017. La precuela, como su nombre indica, profundiza en la vida de la Hermana Narcisa, o Hermana Muerte, como la llamaban los estudiantes de la escuela. Desde joven, Narcisa fue bendecida con el poder de ver más allá de la realidad y la apodaron la 'Santa Niña'. Durante la Guerra Civil Española y la desencadenación del Terror Rojo, Narcisa evolucionó para convertirse en la única esperanza de los creyentes cuando se afirmaba que tenía una conexión con el poder divino.

Diez años después, Narcisa se unió a un convento como novicia. Las marcas de balas en las paredes del convento eran un recordatorio del pasado vergonzoso, pero Narcisa afirmaba no recordar mucho al respecto cuando era niña. Esto sugería que Narcisa se había distanciado de la 'Santa Niña' y que sus visiones ya no eran tan claras como solían serlo. Tan pronto como Narcisa ingresó a la escuela, una canica que rodó en su dirección llamó su atención. Alguien estaba tratando de contactarla, pero ¿quién era?

¿Cuáles eran los Rumores que Narcisa averiguó?

Poco después de instalarse, Narcisa descubrió una caja con cartas, una foto de la Hermana Socorro y unas tijeras. En el momento en que miró la foto, la silla de su habitación cayó al suelo. Podía oír un fuerte golpe en su puerta, y alguien dibujó la figura del ahorcado en la pared. A la mañana siguiente en clase, los estudiantes susurraron mientras ella escribía su nombre en la pizarra. Más tarde, se enteró de que aquellos que escribían sus nombres eran el objetivo de un espíritu oscuro que vivía dentro del recinto escolar. Narcisa inicialmente intentó ser lógica al respecto, pero gradualmente admitió que algo extraño estaba ocurriendo en la escuela. Tenía pesadillas vívidas y siempre se despertaba en pánico. Estaba aún más preocupada cuando una de sus alumnas afirmó haber visto un espíritu al que llamaban "la niña".

Rosa había visto el rostro de una niña en el agua de la bañera, y las mismas tijeras que se encontraban en la habitación de Narcisa fueron halladas junto a la bañera. La Hermana Julia desestimó la afirmación de Rosa y la castigó por difundir miedo. Narcisa creyó en Rosa porque, siendo niña, también podía ver cosas que los demás no veían. En lugar de desestimarla, quería descubrir la razón detrás de los eventos sobrenaturales. Rosa se negó a decir la verdad porque la Hermana Inés, la monja que estaba allí antes de Narcisa, también se había acercado a toda la situación de manera lógica, pero terminó siendo el objetivo de los espíritus malignos. Cuando la Hermana Inés dibujó la última pierna en un juego de ahorcado, los espíritus la atormentaron y ella se fue por miedo. Rosa explicó que si el espíritu escribía el nombre de alguien en la pizarra, significaba que sería el próximo objetivo.

Al día siguiente en clase, el nombre de Rosa estaba escrito en la pizarra, y ella estaba visiblemente tensa. Narcisa prometió proteger a Rosa pasase lo que pasase, pero para hacerlo, necesitaba enfrentarse a los espíritus. Ella y Rosa juntas dibujaron la última pierna del juego del ahorcado. Rosa podía ver el espíritu en la habitación, pero Narcisa no. Cuando Narcisa se volvió para ver el espíritu, Rosa desapareció. Julia culpó a Narcisa por arriesgar la vida de Rosa por sus propios motivos egoístas. Narcisa buscó frenéticamente a la niña, y el espíritu oscuro jugó con ella a través de alucinaciones. Cuando Narcisa recobró la conciencia, encontró el cuerpo de Rosa colgando del techo. Las niñas y las monjas lloraron la muerte de Rosa, y Narcisa se sintió responsable por su incapacidad para protegerla.

Era un eclipse solar, el momento perfecto para invocar a los espíritus oscuros. Narcisa dejó la escuela con su maleta en mano, pero algo del eclipse la hizo detenerse y mirar directamente al sol. O quería destruirse a sí misma, o esperaba ofrecer su visión para poder mirar más allá de la realidad, como lo hacía cuando era niña.

¿Quiénes eran la hermana Socorro y la niña?

El misterio detrás de todos los eventos sobrenaturales estaba enraizado en la muerte de Socorro. Cuando Narcisa expuso sus ojos a los dañinos rayos del sol durante el eclipse solar, se le otorgó el poder de ver más allá de su realidad. Fue llevada atrás en el tiempo, durante la guerra civil, cuando el convento fue saqueado y despojado. Durante ese tiempo, una monja fue violada por un saqueador, y Narcisa se dio cuenta de que la monja era Socorro. Ella llevó el hijo del violador y dio a luz. Mientras tanto, Julia se asustó cuando se dio cuenta de que la visión de Narcisa la estaba guiando hacia el pasado. Había secretos que Julia, Sagrario y la Madre Superiora estaban ocultando, y temían que Narcisa los descubriera. Julia llevó a Narcisa de vuelta a su habitación. Sus ojos se habían vuelto grises; había estado esperando una señal de Dios diciéndole que estaba destinada a dedicar su vida a Cristo, y finalmente, su visión confirmó que estaba en el camino correcto.

Con la ayuda de la foto que tenía de Socorro, Narcisa fue transportada nuevamente al pasado. Podía sentir el dolor y el sufrimiento que Socorro había experimentado, y las monjas del convento no le hicieron la vida más fácil. Creían que su situación solo traería vergüenza al convento, y decidieron esconder para siempre a Socorro y a su bebé. Después de presenciar el sufrimiento de la monja, Narcisa simpatiza con ella. El cuerpo de Socorro se acercó a Narcisa en la realidad, y se aferraron la una a la otra. A través del tacto de Socorro, Narcisa presenció la última injusticia que había enfrentado después del nacimiento de su hija. Julia, Sagrario y la Madre Superiora le arrebataron a Socorro a su hija cuando sufrió una fiebre. Necesitaba atención médica, pero las monjas decidieron que no podían dejar que la joven manchara la reputación del convento. Llevarla al mundo exterior significaba atraer atención, así que decidieron bajar su temperatura bañándola con agua fría. La niña estaba confundida y se resistió. Durante la lucha, la hija de Socorro se golpeó la cabeza y murió en el acto. Esto explicó quién era la niña de la que Rosa habló y por qué ocurrían fenómenos sobrenaturales cada vez que Narcisa se encontraba con la imagen de la Hermana Socorro. Socorro atormentaba a cada monja novicia que aún no había tomado los votos (Inés y Narcisa), y puede interpretarse como su intento de alejarlas del sufrimiento que tuvo que soportar en el convento, aunque, por supuesto, esto no justifica el asesinato de niños.

¿Cómo se restauró la paz?

Cuando Socorro se dio cuenta de que su hija no sobrevivió, se quitó la vida en la misma habitación donde vivía Narcisa. La caída de la silla también puede estar conectada con la muerte de Socorro. Durante el final de "Hermana Muerte", el espíritu de Socorro expresa su deseo de vengarse de todos aquellos que la dañaron a ella y a su hija. Quería venganza, y había estado atormentando almas para experimentar una sensación de satisfacción.

Narcisa se dio cuenta de que la única manera de traer paz sería reuniendo a Socorro con su hija yendo al pasado. Desbloqueó la puerta y le permitió irse, y esto tuvo como consecuencia en una serie de eventos que impactaron el presente. Se altera la línea de tiempo del pasado y eso provoca en el caos presente. Socorro atormentó a Julia y finalmente la atacó hasta la muerte. La Hermana Sagrario y la Madre Superiora vivieron una experiencia similar, y sus vidas tuvieron un trágico final. La muerte de las tres monjas fue la única forma de traer paz, y Narcisa priorizó reunir a la madre y la hija. Estaba convencida de que estaba llevando a cabo su deber divino y haciendo solo lo que creía que era correcto.

Hermana Muerte explica por qué Narcisa se quedó ciega y cómo, de alguna manera, la ayudó a conectarse con el mundo de los espíritus que estaba más allá de la comprensión de las personas comunes. La precuela también muestra por qué la Santa Niña decidió seguir el camino de Cristo. Mientras Narcisa llevó justicia a Socorro y su hija en la película, no dudó en traer destrucción y desatar violencia.

La profesora de Verónica

Al final de "Hermana Muerte", presentan a Narcisa en un aula llena de jóvenes estudiantes. Entre los estudiantes estaba Verónica, a la que ya todos conocemos de la anterior película de Paco Plaza. Por supuesto, el film termina con música de Héroes del silencio 😜.

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