Final de Joe contra el volcán
(1990)Final de Joe contra el volcán (1990)
"Un hombre. Una montaña. un milagro"
Título original: Joe Versus the Volcano
Sinopsis
Joe Banks es un hombre un tanto maniático que odia su trabajo: odia las luces fluorescentes porque cree que le enferman, y tiembla ante la presencia de su jefe Frank Watori; además, se siente atraído por su secretaria, pero no se atreve a hablar con ella. Inesperadamente, su vida cambia cuando, tras visitar al doctor Ellison, se entera de que tiene un tumor cerebral y de que, aunque se sienta bien, morirá en un plazo de cinco meses. Contra todo pronóstico, Joe experimentará un fuerte sentimiento de liberación y de pasión por la vida.
John Patrick Shanley
Director
Georges Delerue
Compositor
Stephen Goldblatt
Fotógrafo
Steven Spielberg
Productor
Reparto principal
Tom Hanks
Meg Ryan
Lloyd Bridges
Dan Hedaya
Ossie Davis
Barry McGovern
Como acaba Joe contra el volcán
Joe Banks es un hombre corriente de Staten Island, que trabaja como administrativo en una triste fábrica para un jefe desagradable y exigente, Frank Waturi. Desganado, apático y enfermo crónico, Banks visita regularmente a médicos que no encuentran nada malo en él. Finalmente, un tal Dr. Ellison le diagnostica una enfermedad incurable llamada "nube cerebral", que no presenta síntomas, pero que le matará en cinco o seis meses. Ellison dice que los síntomas que ha estado experimentando son en realidad psicosomáticos, causados por un trauma en su anterior trabajo como bombero. Ellison le aconseja: "Te queda algo de vida... vívela bien". Joe regaña a su jefe, deja el trabajo y pide una cita a su antigua compañera DeDe. La cita es un éxito, pero cuando Joe le cuenta a DeDe que se está muriendo, ella le dice que no puede aceptar la revelación y se marcha.
Al día siguiente, un rico industrial llamado Samuel Graynamore le hace a Joe una inesperada proposición. Graynamore necesita "bubaru", un mineral esencial para fabricar superconductores. Hay yacimientos del mismo en la pequeña isla de Waponi Woo, en el Pacífico, pero los waponis residentes sólo le dejarán extraerlo si les resuelve un problema. Creen que el dios del fuego del volcán de su isla debe ser apaciguado mediante un sacrificio humano voluntario una vez cada siglo, pero ninguno de ellos está dispuesto a ofrecerse voluntario esta vez. Graynamore se ofrece a pagar lo que Joe quiera para disfrutar de sus últimos días, siempre y cuando salte al volcán en un plazo de 20 días. Sin nada que perder, Joe acepta.
Joe pasa un día y una noche en la ciudad de Nueva York, donde pide consejos a su chófer, Marshall, sobre todo tipo de cosas, desde estilo hasta cómo vivir la vida al máximo. También compra cuatro baúles impermeables de alta gama a un vendedor de maletas fanático.
Joe vuela a Los Ángeles, donde le espera una de las hijas de Graynamore, Angélica, de la alta sociedad. A la mañana siguiente, Angelica lleva a Joe al yate de su padre, el Tweedledee. La capitana es su hermanastra Patricia. Patricia ha aceptado a regañadientes llevar a Joe a Waponi Woo; Graynamore ha prometido darle el yate a cambio.
Tras un comienzo incómodo, Joe y Patricia empiezan a estrechar lazos. Entonces se topan con un tifón. Patricia queda inconsciente y es arrojada por la borda. Joe salta al agua para rescatarla, pero cae un rayo y el yate se hunde. Joe consigue construir una balsa atando sus baúles de vapor. Patricia no recupera el conocimiento hasta pasados varios días. Joe le suministra una pequeña cantidad de agua fresca, mientras él delira poco a poco de sed. Durante el delirio experimenta una revelación y da gracias a Dios por su vida. Cuando Patricia despierta, se siente profundamente conmovida por la abnegación de Joe. Entonces descubren que, por suerte, han llegado a su destino.
Los waponis les agasajan con un gran banquete. Su líder, el jefe Tobi, pregunta por última vez si alguien más se ofrece voluntario, pero no hay nadie y Joe se dirige al volcán. Patricia intenta detenerlo y le declara su amor. Él admite que también la ama, "pero el momento es inoportuno". Patricia convence a Joe para que el jefe los case.
Después, Patricia se niega a separarse de su nuevo marido. Cuando Joe es incapaz de disuadirla, saltan juntos al agua, pero el volcán entra en erupción en ese momento, expulsándolos al océano. La isla se hunde, pero Joe y Patricia desembarcan cerca de los baúles de Joe. Al principio extasiado por su milagrosa salvación, Joe le cuenta a Patricia lo de su fatal nube cerebral. Ella reconoce el nombre del médico de Joe como el del compinche de su padre y se da cuenta de que a Joe le han tendido una trampa. No se está muriendo y pueden vivir felices para siempre.