Mamere (Arnold Ceng) viaja de vuelta a Kenya, decidido a llegar al campamento de refugiados de Kakuma y encontrar a su hermano Theo (Femi Oguns), perdido hace tiempo. Después de algunas investigaciones infructuosas, se encuentra con un amigo común, James (Elikana Jale), que lo lleva a Theo y tienen un reencuentro muy emocionante.

Entonces, Mamere intenta obtener los papeles para que Theo pueda salir de Kenya con él, sin éxito, mientras hace creer a su hermano que lo ha conseguido. Sin embargo, cuando llega el momento de subir al avión, Mamere revela que, en agradecimiento por la deuda de vida que él y sus otros hermanos tenían con Theo, se sacrificaría dándole a Theo su pasaporte para poder reunirse con todos ellos en los Estados Unidos -cuando Theo objeta que es una mentira, Mamere responde que "es una buena mentira"-; tristemente se separan.

Las secuencias finales de la película muestran a Theo reconectándose felizmente con el resto del grupo en los Estados Unidos; Jeremiah (Ger Duany) contando la historia de los Muchachos Perdidos de Sudán, como orador invitado, frente a la misma Congregación a la que pertenecía Carrie (Reese Witherspoon); Mamere comunicando, por teléfono, su decisión a una entristecida Carrie; y Mamere rememorando su infancia en el Sudán, mientras espera con esperanza su decisión de regresar a Kakuma, para trabajar en su hospital.