Una familia - Eric y Andrew más su hija Wen - se encuentra con cuatro extraños: Leonard, Sabrina, Adriane y Redmond. El grupo le dice a la familia que han sido elegidos para que uno de ellos sea sacrificado o, de lo contrario, se producirá el apocalipsis y el fin de la humanidad. Por cada vez que fallen en su elección, el mundo sufrirá, y cada miembro del grupo será asesinado.

Mientras Andrew cree que el grupo iba a por él y Eric porque son una pareja gay, sobre todo porque Redmond fue el hombre que agredió y hospitalizó a Andrew en un bar, empiezan a producirse sucesos apocalípticos como terremotos, tsunamis, un virus mortal y quiebras masivas de aerolíneas. Después de que cada miembro del grupo muere, Eric (que sufrió una conmoción cerebral anteriormente) afirma que ha estado viendo visiones iguales a las que el grupo vio del apocalipsis, y cree que el grupo eran los Cuatro Jinetes del Apocalipsis, venidos para advertirles del apocalipsis. Eric hace las paces con su muerte si eso significa que Andrew y Wen podrán vivir felices juntos, y se deja matar, acabando así con el apocalipsis.

Andrew y Wen se enteran de que las catástrofes se están calmando y vuelven juntos a casa.