La película comienza cuando se desencadenan una serie de eventos después del asesinato de la soldado Patti Jean Lynch en la base del Ejército de los Estados Unidos en el Presidio de San Francisco. Jay Austin, detective del Departamento de Policía de San Francisco y exsoldado de la Policía Militar, es enviado a investigar. Se enfrenta al teniente coronel Alan Caldwell, el comandante de la base.

Años atrás, Austin y Lynch eran compañeros mientras servían como policías militares, y Caldwell era su oficial al mando. Cuando Austin arrestó al teniente coronel Paul Lawrence por conducir ebrio y lo agredió después de insultar a Lynch, Caldwell no lo respaldó. Como resultado, Austin fue degradado y decidió abandonar el ejército.

La investigación levanta sospechas sobre Lawrence, ya que Lynch fue asesinada con una pistola Tokarev de 7.62 mm. Lawrence es el propietario registrado de una Tokarev, pero afirma haberla perdido en un juego de póquer. Austin también descubre que el automóvil utilizado por el asesino de Lynch está registrado a nombre de un civil llamado Arthur Peale, quien es adinerado y dueño de una empresa de inversiones.

Austin intenta interrogar a Lawrence sobre la Tokarev, pero Caldwell interviene. Reconociendo que tienen jurisdicción compartida en el caso, deciden trabajar juntos de manera incómoda para investigar. Caldwell establece que si la bala de la Tokarev que mató a Lynch coincide con una bala disparada anteriormente por Lawrence en el campo de tiro de Presidio, Caldwell hará que Lawrence se entregue a Austin. Mientras tanto, Caldwell y Austin visitan a Peale, quien afirma que su automóvil fue robado y tiene coartada para la noche en que Lynch fue asesinada. Caldwell ve objetos relacionados con la guerra de Vietnam en la oficina de Peale. Caldwell descubre que Peale fue anteriormente de la CIA y asesor militar en Vietnam al mismo tiempo que Lawrence estuvo allí.

Austin recibe el informe balístico de la Tokarev, que confirma que el arma de Lawrence mató a Lynch. Austin acorrala a Lawrence cuando sale del Presidio, lo que da lugar a una persecución a pie por Chinatown. Lawrence muere en un accidente de atropello y fuga. Caldwell está furioso porque Austin ignoró su acuerdo. Caldwell confía en su amigo, el sargento mayor retirado Ross Maclure, quien sirvió junto a Caldwell en Vietnam.

Caldwell y Austin descubren que el asesino en el Presidio intentaba ingresar a un almacén para recuperar una botella de agua mineral. Siguiendo la pista hasta la compañía de agua, Austin obtiene el nombre del repartidor, George Spota. Caldwell reconoce el nombre como alguien que sirvió bajo el mando de Lawrence en Vietnam. Austin confirma que el automóvil de Spota golpeó y mató a Lawrence durante la persecución a pie, y Caldwell descubre que la compañía de agua para la que trabaja Spota es propiedad de Peale. Austin y Caldwell siguen a Spota durante sus entregas. Spota realiza una entrega en la Base de la Fuerza Aérea Travis y recoge una botella de agua que fue transportada desde Filipinas.

Austin y Caldwell ven cómo se revela la conspiración. Spota, Lawrence y Peale se conocieron en Vietnam. Spota recogió una entrega de agua de Filipinas, pero dejó accidentalmente esa botella de agua en el almacén del Presidio. Cuando se dio cuenta de su error, regresó a recuperarla, pero Lynch lo sorprendió durante el allanamiento y él la disparó.

Justo cuando comprenden esto, ven llegar a Maclure. Caldwell se da cuenta de que Peale y Lawrence habrían necesitado a alguien como Maclure para llevar a cabo el contrabando, porque Maclure tenía contactos en el ejército de EE. UU. en Asia. Spota y Peale abren la botella que proviene de Filipinas, revelando diamantes en su interior. Maclure entra y los sorprende sacando un arma. Peale revela que Lawrence estaba chantajeando a Maclure. Peale intenta convencer a Maclure de que permita que el contrabando continúe, pero Maclure está disgustado y desconsolado por la muerte de Lynch. Él dice que el contrabando debe detenerse, pero luego es despojado de su arma por los hombres de Peale. Justo cuando Peale está a punto de matar a Maclure, Caldwell y Austin entran. Se desata un tiroteo en el que Peale y sus hombres son asesinados y Maclure resulta mortalmente herido.

Caldwell le pide a Austin que retrase su informe policial durante 48 horas para darle tiempo de enterrar a Maclure con su honor intacto. Austin acepta. En un funeral militar, Caldwell pronuncia emocionado el elogio fúnebre de Maclure. Caldwell se reconcilia con su hija Donna, quien siente una atracción mutua con Austin, y admite a regañadientes a Austin en la familia.