En 2018, Jonathan E. es el capitán del equipo y veterana estrella del equipo de Rollerball de Houston. El Sr. Bartholomew, presidente de la Corporación Energética y patrocinador del equipo, ofrece a Jonathan un lujoso paquete de jubilación si anuncia su retiro durante un próximo especial de televisión que detalla su carrera. Jonathan se niega y solicita ver a su ex esposa Ella, quien había sido llevada de él años antes por un ejecutivo corporativo que la quería para sí mismo.

La manipulación de la información

Jonathan va a una biblioteca, donde descubre que todos los libros han sido digitalizados y editados para adaptarse a las corporaciones, y ahora se almacenan en supercomputadoras en grandes ubicaciones corporativas protegidas. El amigo y ex entrenador de Jonathan, Cletus, ahora un ejecutivo de Energía, le advierte que el Comité Ejecutivo le teme, aunque no puede descubrir por qué.

Rollerball pronto se degrada en violencia sin sentido a medida que las reglas cambian solo para forzar la salida de Jonathan. El partido de semifinales entre Houston y Tokio se juega sin penalizaciones y con sustituciones limitadas con la esperanza de que Jonathan resulte herido y se vea obligado a retirarse antes del juego del campeonato. La brutalidad del partido mata a varios jugadores y deja al mejor amigo y compañero de equipo de Jonathan, Moonpie, en coma.

La amenaza del comité ejecutivo

En una teleconferencia, el Comité Ejecutivo decide que el próximo juego se jugará sin penalizaciones, sin sustituciones y sin límite de tiempo con la esperanza de que Jonathan sea asesinado durante el juego. La popularidad y longevidad de Jonathan como jugador amenazan la agenda subyacente de Rollerball: demostrar la futilidad del individualismo.

Jonathan se dirige a Ginebra para acceder al repositorio mundial de todo el conocimiento humano, una supercomputadora central conocida como "Zero", solo para descubrir que su memoria está corrupta. Después, Jonathan recibe una visita de su ex esposa Ella, quien ha sido enviada para convencerlo de que se retire y para dejar claro que el próximo juego será "hasta la muerte". Jonathan se da cuenta de que la visita de su esposa fue organizada por los Ejecutivos y borra una película muy apreciada de ambos, diciendo: "Solo quería que estuvieras de mi lado". Jonathan decide que, a pesar de los peligros, jugará en el juego del campeonato entre Houston y Nueva York.

El juego final

El partido final se convierte en una lucha gladiatorial. Pronto, Jonathan es el único jugador que queda en la pista para Houston, mientras que un patinador y un motociclista permanecen de Nueva York. Después de una violenta lucha frente al palco del Sr. Bartholomew, Jonathan mata al patinador y toma la pelota. El motociclista carga contra él, y Jonathan lo derriba y lo inmoviliza. Levanta la pelota sobre su cabeza, luego se detiene. Negándose a matar a su oponente caído, Jonathan se pone de pie y se dirige a la portería, lanzando la pelota y anotando el único punto del juego. Después de un sangriento partido en el que todos sus compañeros de equipo son asesinados o heridos, pero que milagrosamente sobrevive, Jonathan da una vuelta de victoria mientras la multitud corea su nombre, primero suavemente, luego más fuerte, y finalmente como un rugido mientras el Sr. Bartholomew sale rápidamente de las gradas.