Utilizando un prototipo avanzado de Gunstar, Alex y Grig se dirigen a la Frontera para atacar por sorpresa a Xur y a la armada Ko-Dan en solitario, ya que los villanos creen que todos los cazas estelares murieron cuando asaltaron su base y Xur supuso que el asesino Zando-Zan que enviaron a la Tierra para matar a Alex había tenido éxito (la copia de la unidad Beta de Alex -dejada en la Tierra para que pareciera que Alex seguía allí- mató al asesino, aunque al hacerlo se destruyó a sí mismo). Atacan la nave de mando de la armada justo cuando la flota comienza a dirigirse a Rylos y destruyen su torreta de comunicaciones, y después de que el comandante de la armada, Lord Kril, descubre que la nave atacante es una Gunstar, llega a su punto de ruptura con Xur y ordena que lo encierren en el calabozo. Sin embargo, de camino allí, Xur consigue liberarse y huir en una cápsula de escape.

Alex y Grig acaban utilizando el arma Death Blossom de la Gunstar para destruir todas las naves excepto la nave de mando. Cuando la nave de mando intenta embestirlos, Alex dispara y daña gravemente sus controles de guía, haciendo que caiga en la atracción gravitatoria de la luna de Rylos y quede destruida. Alex y Grig aterrizan en Rylos y son recibidos como héroes. Enduran convence a Alex para que se quede y reconstruya la Legión de Cazas Estelares, ya que la Frontera ha caído y Xur sigue en libertad.

Sin embargo, Alex hace primero un viaje de vuelta a su comunidad de remolques en la Tierra, con Grig uniéndose a él. Después de que Grig informe a los residentes de los actos heroicos de Alex, éste le cuenta a Maggie -que se enteró de la misión de Alex a través de la unidad Beta- que ha vuelto porque quiere que se reúna con él, ya que no sabe cuándo será su próxima visita a la Tierra. Después de obtener la bendición de su abuela, Maggie despega al espacio con Alex, y Louis, el hermano pequeño de Alex, empieza a jugar al juego arcade Starfighter con la esperanza de poder unirse a él algún día.