Final de Wimbledon. El amor está en juego
(2004)Final de Wimbledon. El amor está en juego (2004)
Título original: Wimbledon
Sinopsis
Peter (Paul Bettany), un tenista que ocupa un lugar muy bajo en el ranking internacional, decide participar en el torneo de Wimbledon, aunque sus posibilidades de éxito son prácticamente nulas. Durante el torneo, conoce a la tenista americana Lizzie (Kirsten Dunst) y se enamora de ella. Entonces, su afán de superación unido a su destreza y a una racha de buena suerte lo catapultan de una ronda a la siguiente, teniendo al alcance de su mano el viejo sueño de ganar uno de los títulos del Gran Slam.
Richard Loncraine
Director
Adam Brooks
Escritor
Ed Shearmur
Compositor
Darius Khondji
Fotógrafo
Tim Bevan
Productor
Reparto principal
Kirsten Dunst
Paul Bettany
Sam Neill
Jon Favreau
Bernard Hill
Eleanor Bron
Como acaba Wimbledon. El amor está en juego
Peter Colt, un tenista profesional británico de treinta años cuya clasificación ha descendido del puesto 11 al 119 del mundo, nunca ha tenido que luchar realmente por nada, ya que su rica familia le permitía perseguir fácilmente sus ambiciones tenísticas. Aunque consigue una plaza de comodín para el torneo de Wimbledon, cree que ha llegado el momento de admitir que se está haciendo demasiado viejo para competir con jugadores más jóvenes y en forma, y pretende, después de este último Wimbledon, aceptar un trabajo en un prestigioso club de tenis.
Al comenzar Wimbledon, se topa con Lizzie Bradbury, la estrella estadounidense en ascenso del tenis femenino. Se enamoran y el interés de ella por él cambia toda su percepción, dándole incluso fuerzas para volver a ganar. A medida que su amor crece, el juego de Peter es cada vez mejor. Dennis Bradbury, el sobreprotector padre de Lizzie, se empeña en cortar de raíz su relación, por considerarla perjudicial para su carrera. Un día, Dennis acude al antiguo piso de Peter y le grita por estropear el juego de su hija. Lizzie lo oye y decide dejarle y centrarse en su juego.
La noche anterior a sus partidos de semifinales, Peter se cuela en la habitación de hotel de Lizzie y la convence para tener relaciones sexuales. Al día siguiente, él rinde por encima de las expectativas y gana en sets corridos, pero Lizzie pierde. Lizzie rompe airadamente con Peter, alegando que su egoísmo le hizo perder, y decide regresar inmediatamente a Estados Unidos para entrenar.
Peter tiene que jugar el partido final contra Jake Hammond, una arrogante estrella estadounidense y número 1 del mundo. En el aeropuerto, Lizzie ve una entrevista en la televisión en la que Peter se disculpa y le declara su amor. Regresa a Wimbledon.
Cuando Lizzie llega al estadio, Peter ha perdido dos sets en la final y va por detrás en el tercero. Cuando el partido se suspende por la lluvia, Lizzie aparece en el vestuario y le perdona. Le cuenta el secreto de los complicados saques de Jake y Peter remonta para ganar el título (3-6, 2-6, 6-4, 7-6(8-6), 6-4). Convertido en héroe nacional en Gran Bretaña, él y Lizzie se casan. Con su apoyo, Lizzie gana el Abierto de Estados Unidos y Wimbledon en dos ocasiones, alcanzando finalmente sus sueños. En la última escena, Peter está con su hijo menor, un niño, viendo a Lizzie y a su hijo mayor, una niña, jugar al tenis en una pista del barrio de Nueva York.