Final de Don't Let Go explicado
El hermano de Jack Ratcliff, Garret, su esposa Susan y su hija Ashley mueren en lo que parece ser un asesinato-suicidio. Sin embargo, Jack recibe una llamada de Ashley de dos semanas en el pasado justo antes de su muerte. Jack hace lo que puede para evitar su muerte al descubrir quién realmente la mató a ella y a su familia, pero le oculta la verdad.
De la propia investigación de Ashley sobre los tratos de su padre, recibe el nombre de “Georgie“, de quien Howard, el jefe de Jack, dice que es una misteriosa figura criminal que ha evadido la captura durante mucho tiempo. Cuando Ashley comienza a preguntar cosas y Jack no puede responderle, deja de hablar con él y su muerte ocurre un día antes que lo previsto.
En la nueva línea de tiempo, Ashley escapa de uno de los matones de Georgie después de descubrir su lugar de reunión. Ella y Jack pronto se enteran de que Bobby, el compañero de Jack, era el verdadero asesino involucrado con Georgie, que en realidad es una organización completa de policías corruptos. Bobby mata a Howard en la línea de tiempo actual, mientras que su yo pasado mata a Ashley y su familia. Él mata a sus padres, pero ella escapa y corre a la casa de Jack. Justo antes de que Bobby mate a Jack en el presente, Jack lo mata en el pasado, lo que borra la esa línea de tiempo y evita la muerte de Ashley. Ahora que está huérfana, lo más probable es que Jack cuide de ella.
