En 1881, el joven Robert "Bob" Ford busca a Jesse James cuando la banda de los James está planeando un asalto a un tren en Blue Cut, Missouri, e intenta sin éxito unirse a la banda con la ayuda de su hermano mayor Charley, que ya es miembro. El tren resulta llevar sólo una fracción del dinero que se pensaba inicialmente, y un desanimado Frank James abandona la banda y a su hermano. Jesse regresa a su casa en Kansas City, Missouri, llevando a los Ford, Dick Liddil y el primo de Jesse, Wood Hite. Jesse despide a Charley, Wood y Dick, pero insiste en que Bob se quede por su ayuda en el traslado de los muebles a una nueva casa en St. Joseph, Missouri. Bob se vuelve más admirador de Jesse antes de ser enviado lejos. Se queda en la granja de su hermana viuda, Martha Bolton, donde se reúne con su hermano Charley, Hite y Liddil.

Liddil revela a Bob que está en connivencia con otro miembro de la banda de James, Jim Cummins, para capturar a Jesse por una recompensa sustancial. Mientras tanto, Jesse visita a otro miembro de la banda, Ed Miller, que le da información sobre el complot de Cummins. Jesse mata a Miller y luego parte con Liddil para dar caza a Cummins. Al no poder localizarlo, Jesse golpea con saña a Albert Ford, un joven primo de Bob y Charley que lo había hospedado. Más tarde, Liddil se queda con Hite en la casa del padre de éste, donde tiene relaciones sexuales con la joven madrastra de Hite. Al enterarse de esto, Hite sigue a Liddil hasta Bolton's y lo retiene a punta de pistola, pero Bob interviene, disparando fatalmente a Hite. Tiran su cuerpo en el bosque para ocultar el asesinato a Jesse.

Jesse aparece en casa de los Bolton para cenar, donde los Ford niegan haber visto a Liddil recientemente. Durante la cena, Jesse se burla de Bob por su idolatría hacia él, lo que lleva a Bob a estar menos encantado y más resentido con Jesse, especialmente después de enterarse de lo que le hicieron a su primo. Jesse y Charley viajan a St. Joseph donde Jesse se entera de la desaparición de Hite, de la que Charley niega saber nada. Mientras tanto, Bob acude al comisario de policía de Kansas City, Henry Craig, diciendo que conoce el paradero de Jesse. Para demostrar su lealtad con la banda de James, Bob insta a Craig a que arreste a Dick Liddil. Tras el arresto de Liddil y la confesión de su participación en numerosos robos de la banda, Bob negocia un acuerdo con el Gobernador de Missouri, Thomas T. Crittenden. Le dan diez días para capturar o matar a Jesse y le prometen una importante recompensa y el perdón total por el asesinato.

Charley convence a Jesse para que acepte a Bob en la banda; los hermanos regresan a St. Presentados como primos a la esposa y los dos hijos de Jesse, se quedan con la familia. Jesse quiere revivir su banda mediante robos con los Ford, empezando por el banco de Platte City. Durante su estancia, Jesse desconfía cada vez más de los hermanos, no permitiéndoles estar juntos a solas. Sin embargo, como la estancia transcurre sin incidentes, más tarde le da a Bob una pistola como muestra de disculpa. En la mañana del 3 de abril de 1882, mientras Jesse y los hermanos Ford se preparan para partir hacia el robo, Jesse lee en el periódico sobre el arresto y la confesión de Liddil. Mientras los tres hombres están en el salón, Jesse se quita el cinturón de la pistola y se sube a una silla para limpiar un cuadro polvoriento. Bob dispara a Jesse en la nuca con la pistola que le han dado. Huye con Charley. Envían un telegrama al gobernador para anunciar la muerte de Jesse, por la que iban a recibir 10.000 dólares. Sin embargo, nunca reciben más de 500 dólares cada uno.

Después del asesinato, los Ford esperan convertirse en celebridades, haciendo una gira con un espectáculo teatral en Manhattan en el que recrean el tiroteo, pero la gente pronto se vuelve hostil hacia la pareja, aclamando a Jesse como una leyenda y llamando a Bob "cobarde". Atribulado, Charley escribe numerosas cartas a Zee James pidiéndole perdón, pero no las envía. Aquejado de una tuberculosis terminal, se suicida en mayo de 1884. Bob trabaja en el Oeste como propietario de un saloon, arrepintiéndose cada vez más de sus acciones pasadas. El 8 de junio de 1892, Bob es asesinado por Edward O'Kelley en su taberna de Creede, Colorado. O'Kelley es condenado a cadena perpetua, pero es indultado después de diez años en 1902.