Final de El mismo amor, la misma lluvia
(1999)Final de El mismo amor, la misma lluvia (1999)
Título original: El mismo amor, la misma lluvia
Sinopsis
Jorge, de 28 años, es la joven promesa de la literatura argentina, aunque en realidad vive de los cuentos románticos que escribe para una revista de actualidad. Una noche conoce a Laura, una soñadora camarera que sigue esperando el regreso de su novio, un artista que está montando una exposición en Uruguay y del que no tiene noticias desde hace meses. Entre ellos nace el amor y pronto se convierten en pareja. Pero la convivencia entre ellos se va deteriorando y su relación acaba en ruptura.
Juan José Campanella
Director
Juan José Campanella
Escritor
Emilio Kauderer
Compositor
Jorge Estrada Mora
Productor
Reparto principal
Ricardo Darín
Soledad Villamil
Eduardo Blanco
Ulises Dumont
Alfonso De Grazia
Alicia Zanca
Como acaba El mismo amor, la misma lluvia
En 1980, Jorge Pellegrini (Ricardo Darín), un joven y talentoso escritor argentino, al regresar de un viaje a Europa, se ve obligado a escribir breves historias de amor para "Cosas", una revista local de temática ligera, para ayudar a su desesperada situación económica. Su jefe y mejor amigo, Roberto (Eduardo Blanco), censura constantemente las historias de Jorge, decidiendo qué partes se eliminan o qué historias no se publican. El amigo y mentor de Jorge, Mastronardi, visita a menudo la sede de la revista pidiendo trabajo a Roberto, pero debido a su historia de valiente enfrentamiento contra la última dictadura militar en Argentina, se encuentra en la lista negra y por tanto no puede encontrar trabajo.
En la proyección de un cortometraje, basado en un relato de Jorge, conoce a Laura (Soledad Villamil), una joven apasionada, bella y encantadora que trabaja como camarera en un restaurante. Se queda prendado de ella al instante, y ella le regala la caja de cerillas personalizada del restaurante en el que trabaja, diciendo que es su tarjeta. Días después, recibe la noticia de la muerte de Mastronardi, y comienza a escribir una historia sobre su amigo fallecido. Sin embargo, sufre un bloqueo de escritor y no consigue terminarlo. Jorge encuentra entonces la caja de cerillas que le regaló Laura y decide ir al restaurante donde ella es camarera. Tienen una cita en un bar, y muestran química y entendimiento, y Laura revela que tiene novio, un artista de gira en Uruguay. Las cosas se tuercen cuando la policía hace una redada y lleva a Laura y a un grupo de personas que no pudieron mostrar sus documentos a la cárcel, para ser investigados como parte de las operaciones militares para mantener el orden social durante la guerra sucia de Argentina. Jorge es llevado a la cárcel después de intentar ayudar a Laura. Una vez liberados, Laura y Jorge pasan cada vez más tiempo juntos, y Jorge le revela sus sentimientos por Laura. Ella le dice entonces que por el momento no le corresponde, pero que le llamará si "descubre algún contexto" en el que pueda hacerlo.
Pasan los meses y Jorge se entierra en su trabajo, empieza un diario (que luego tira) y pierde la esperanza de recibir la llamada de Laura. Sin embargo, ella le llama entonces y conciertan una cita, en la que le revela que quería estar segura de no esperar más a su novio antes de iniciar una nueva relación. Se besan, hacen el amor y comienzan una relación. Los primeros meses están llenos de romanticismo y pasión; sin embargo, cuando Laura decide dejar su trabajo para trabajar gratis en una emisora de radio local, Jorge empieza a perder interés en ella, y le molesta constantemente la monotonía de su relación. Para empeorar las cosas, Laura ha decidido convertir a Jorge en un gran escritor, y le presiona constantemente para que deje de escribir las breves y simplonas historias de amor y se centre en un libro potente.
Cuando Jorge llega al punto de ruptura y no soporta el estado actual de su relación con Laura, la engaña con una chica que conoce en la revista (Carola). Laura lo descubre y le deja inmediatamente. Jorge, de nuevo, se entierra en su trabajo durante dos años, hasta que recibe la noticia de Roberto de que, debido a un nuevo formato, la revista dejará de publicar sus historias. Sin embargo, le ofrecen un trabajo como crítico de cine y teatro de la revista, que rechaza airadamente. Entonces encuentra la inspiración para terminar la historia de Mastronardi y llevarla al teatro. Sin embargo, la obra es un fracaso, y por el esfuerzo y el dinero que ha invertido en ella, Jorge tiene el corazón roto. Laura va a ver la obra pero él la evita. Tras el cierre de la obra, Jorge recibe la emotiva visita del espíritu de Mastronardi en un sueño, que le pide que cuide de su hijo, Sebastián.
En 1987, las cosas han cambiado: Jorge ha aceptado la oferta de trabajo como crítico de cine y teatro, y Roberto está comprometido con Marita, una amiga de Laura a la que conoció en una cita doble organizada por Jorge y Laura años antes. Jorge tiene una relación con una nueva chica; sin embargo, se ve sorprendido cuando recibe la noticia de que Laura se va a casar con su antiguo novio. Esto lleva a Jorge a seguir a Laura y, tras pasar un día juntos, hacen el amor, y Laura decide entonces que se casará de todos modos.
De nuevo pasan los años y, en la década de los 90, un Jorge amargado y desilusionado, sigue trabajando como crítico. Sin embargo, debido a sus fracasos y decepciones, y a la pérdida de su espíritu y moral, nos enteramos de que ahora pide dinero a cambio de escribir críticas favorables. Esto se vuelve en su contra cuando Laura, una de las productoras de la película para la que pidió dinero por escribir una crítica favorable, le entrega personalmente el dinero y le mira con disgusto.
Un día en la oficina, debido a un desacuerdo, el veterano periodista político Márquez (Ulises Dumont) tiene un acalorado intercambio con su jefe, el joven Micky (Rodrigo de la Serna) y es despedido. Esto hace que Sebastián, el hijo de Mastronardi, culpe a Jorge de la muerte de su padre. Incapaz de sobrellevar la culpa, y tras darse cuenta de lo mucho que ha cambiado, Jorge intenta suicidarse. Este intento, sin embargo, es frustrado por Roberto, que llega justo a tiempo para salvarlo. Tras el intento de suicidio, se celebra una fiesta sorpresa, en la que los empleados de Cosas deciden donar una doceava parte de sus salarios a Márquez. Laura y Jorge se reúnen de nuevo y comparten una larga charla sobre sus vidas, sus esperanzas y sus sueños frustrados.
La película termina con un indicio de que Jorge y Laura se darán una última oportunidad en su relación. Jorge, revitalizado y con aspecto de hombre feliz por primera vez en años, ve partir su taxi con una amplia sonrisa. Entonces le saludan sus amigos, Márquez, Sebastián y Roberto, y les habla de la nueva historia de amor que piensa escribir.