Final de El sentido de un final explicado
Palabras finales de El sentido de un final
“He estado pensando en la nostalgia y en si sufro. Supongo que soy nostálgico. Pienso en mi tiempo con el nacimiento de Margaret y Susie y sus primeros años. Un grupo de niños en la escuela. Una chica bailando por una vez en su vida. Un gesto secreto bajo una glicina iluminada por el sol. Pienso en la definición de la historia de Adrián.
Pienso en todo lo que ha sucedido en mi vida y en lo poco que he permitido que ocurra. Yo, que ni gané ni perdí. Quien evitó ser lastimado y lo llamó una capacidad de supervivencia. Pienso en cómo nuestras vidas se entrelazaron y estuvieron juntas durante un tiempo. Y cuando miro hacia atrás, ahora, en ese momento, por breve que sea, me muevo más de lo que creí posible. De hecho, lamento que no haya sabido nada de su vida en los años posteriores. Sin duda, podrías haberle enseñado a este viejo tonto una cosa o dos. Perhaps, in a way, you have.”
Tony ha aprendido algo de todo esto. Comienza a enfocarse más en el presente, comienza a vivir con una perspectiva clara, prestando más atención a las cosas a su alrededor para que no se pierda la vida una vez más. Es una buena manera de terminar la historia, cuando vemos a Tony volver a la silla de nuevo, pidiendo perdón por no estar allí, y luego seguir viviendo sin remordimientos.
Tony elige recordar lo que él elige recordar. Siempre ha sido así. Incluso después de que se le revela la verdad, los recuerdos de Sarah se han visto restringidos en su cabeza. Literalmente no recuerda nada de pasar tiempo con ella, y claramente lo escupió durante sus últimas palabras de consuelo de consuelo: “lo poco que he permitido que ocurra” o “evitó que lo lastimaran”. Es bastante auto explicativo de Tony, de cómo él elige vivir.