Final de En lo profundo del océano

(1999)
Final de En lo profundo del océano

Título original: The Deep End of the Ocean

12/03/1999 (ES)Drama, Misterio106 min

Sinopsis

Año 1988. Beth Cappadora es una fotógrafa felizmente casada con Pat, el dueño de un restaurante. El matrimonio vive en Madison con sus tres hijos. Un día, mientras están en un hotel con los niños, Ben, el más pequeño, desaparece, y a pesar de la búsqueda frenética que emprende la policía no consiguen encontrarlo. Nueve años más tarde, la familia, en principio ya recuperada del terrible suceso, vive en Chicago, donde Pat ha abierto un restaurante. Pero un día en su barrio conocen a un chico llamado Sam Karras que tiene un parecido asombroso con su hijo Ben.

Ulu Grosbard

Director

Elmer Bernstein

Compositor

Stephen Goldblatt

Fotógrafo

Reparto principal

Michelle Pfeiffer

Michelle Pfeiffer

Treat Williams

Treat Williams

Whoopi Goldberg

Whoopi Goldberg

Jonathan Jackson

Jonathan Jackson

Ryan Merriman

Ryan Merriman

Alexa PenaVega

Alexa PenaVega

Como acaba En lo profundo del océano

Hay muchas cosas que se pueden perder en este mundo, pero la pérdida de un hijo conlleva un dolor incomparable. Es algo que rompe el corazón y destroza el alma y es difícil, si no imposible, de sobrellevar. The Deep End of the Ocean" trata de captar este dolor siguiendo la historia de una mujer llamada Beth. Protagonizada por Michelle Pfeiffer, la película narra el periplo de una familia que se ve abocada al infierno cuando pierde a un joven miembro.

Mientras que muchas películas de este tipo se centran en el crimen y su investigación, ésta se desplaza hacia la profundidad emocional de la situación. Da un paso más en su exploración de la complejidad de las emociones humanas al resolver el crimen y sumergirse en sus secuelas. Utiliza diferentes perspectivas para dar al público un sentido completo de la situación y, al final, le deja con algo en lo que pensar.

En lo profundo del océano, resumen de la trama


Beth Cappadora llega a su decimoquinta reunión del instituto con sus tres hijos. El hotel está lleno de invitados y, en medio de todo este barullo, Beth deja a su hijo mayor, Vincent, para que cuide al menor, Ben, sólo por un rato. Es sólo por unos minutos que los pierde de vista, pero eso es suficiente para que ocurra una tragedia. Al volver, descubre que Ben ha desaparecido.

Las horas se convierten en días y pronto pasan meses y años sin que haya rastro de Ben. Parece como si se hubiera desvanecido en el aire y, finalmente, Beth decide que es hora de aceptar el hecho de que no va a volver. La familia se traslada a Chicago para empezar de nuevo. Un día, un niño llama a su puerta y Beth se sorprende por su gran parecido con Ben. Comparte esta noticia con su marido y luego con la policía, y todos coinciden en que ese niño, Sam, podría ser su hijo perdido. Mientras la familia Cappadora se prepara para traer a Ben de vuelta a casa, no anticipan los desafíos que vendrán con ello.

Como acaba En lo profundo del océano


El dolor de la pérdida de Ben era inimaginable para Beth, pero su regreso, aunque fuera nueve años después de haberlo perdido, la reconfortó un poco. Ella y Pat por fin tenían a su familia completa de nuevo. Mientras empezaban a asentarse en esa antigua vida, Beth se dio cuenta de que Ben ya no era Ben. El niño que trajo a casa era Sam, que había vivido con una familia diferente y había tenido una educación distinta a la de la familia Cappadora. Se había perdido a una edad tan temprana que no recordaba la familia que solía tener. Lo único que sabía era que lo habían sacado a la fuerza de su casa y que el mundo decía que su madre, a la que amaba, era una secuestradora. Había sido desarraigado de su vida y no entendía por qué.

A pesar de su felicidad por haber recuperado a su hijo, Beth puede ver que Sam no es feliz. Todas las noches se escapa de su habitación para ir a dos manzanas de distancia a la casa de George. Ella teme que si lo detienen, él empiece a resentirse y su tristeza pueda llevar a algo peor que su desaparición. Así que, aunque le rompe el corazón, decide enviar a Sam de vuelta con George. No valdría la pena arruinar su vida a cambio de gratificar su propia versión, y la de Pat, de lo que debería ser su familia. El único consuelo de esta situación sería que su hijo está vivo y bien y, sobre todo, feliz.

Dejar a Sam en casa de George la hace sentir como el fin de todo. Las cosas empiezan a desmoronarse entre ella y Pat, y Vincent también empieza a entrar en barrena. Justo cuando todo parece desmoronarse, Sam aparece en la puerta de su casa en medio de la noche. Al principio, invita a Vincent a un partido de baloncesto. Pero luego, le revela que ha vuelto a vivir con ellos. Dice que él y George tuvieron una charla durante la semana pasada y que encontraron que era mejor que se quedara con las Cappadoras. Cuando Vincent le pregunta si ha vuelto definitivamente, dice que no lo sabe.

¿Qué pasa al final de la película El lado profundo del mar?



Para entender el final de la película, hay que ponerse en la piel de Sam. Está dividido entre dos familias, sin saber cuál es su pasado y cuál debe ser su presente. A pesar de haber sido secuestrado, creció en un hogar lleno de amor. Aunque le dijeron que no era su familia original con la que había estado viviendo, fue después de que le obligaran a mudarse con las Cappadoras cuando se sintió cautivo. Si pudiera, volvería con George y su antigua vida, pero no es tan sencillo.

Sam había estado en una encrucijada con su decisión, y fue después de hablar con George que encontró una manera de seguir adelante. No es de extrañar teniendo en cuenta que George siempre había sido una persona amable y considerada. Incluso cuando tuvo todas las oportunidades para huir con Sam y no volver jamás, no lo hizo. Más bien, puso fin a la costumbre del chico de escaparse de casa todas las noches. No habría sido una decisión fácil para George, pero sabía que sería lo mejor para todos. Conocía el dolor por el que habían pasado las Cappadoras, y después de sufrir durante todos estos años, no sería justo para ellas perder a su hijo justo cuando lo recuperaban. Así que probablemente aconsejó a Sam que volviera con su familia original.

Aunque está dispuesto a darle una oportunidad, Sam sabe que arreglarse con la familia Cappadora no sería pan comido. Aunque lo querían de vuelta, seguía siendo un extraño para ellos, y viceversa. Creció en un entorno cultural diferente y se relacionó con parientes distintos. Dejar todo eso atrás sería imposible. Nueve años es mucho tiempo, y quizás hubiera sido más fácil intentar olvidar todo eso si hubiera sido una mala experiencia. Tal vez si George hubiera sido un mal padre y Cecil no lo hubiera tratado como a su propio hijo, le hubiera resultado más fácil deslizarse hacia el amor que le ofrecían las Cappadoras. Pero las cosas no eran así, y todos debían aceptar ese hecho.

Por eso, cuando Sam le dice a Vincent que no sabe si su estancia es permanente, sólo está siendo sincero con la situación. Tal vez, todos encuentren una manera de hacer las paces con su historia y permitir que su otra familia entre en el redil. Tal vez las Cappadoras encuentren en sí mismas la manera de compartirlo, de equilibrar su pasado con su futuro. No sería sin lucha y necesitaría que todos pusieran de su parte. Si lo consiguen, la vida de Sam será más fácil. Si no, tendrán que hacer lo mejor para todos. Pero por el momento, Sam está aquí para quedarse, y tomar las cosas un día a la vez sería el mejor enfoque para manejar su situación.

¿Es la película "En lo profundo del océano" una historia real?


No, la película no está basada en una historia real. Está basada en el libro del mismo nombre ("The Deep End of the Ocean"), escrito por Jacquelyn Mitchard, que se publicó por primera vez en 1996. La idea de la novela surgió en un sueño de Mitchard. "Sé que suena bastante New Age, pero soy una chica corriente. Tuve un sueño y soñé toda la trama de esta novela. Podía recordar los nombres de las personas y todo lo demás", explicó en una entrevista con The Morning Call.