In the Heights, de Jon M. Chu, la superproducción del verano adaptada del musical de Lin-Manuel Miranda, ganador de un Tony a finales de la década de 2000, comienza con Usnavi (Anthony Ramos) rodeado de niños en una playa. Les habla de un bloque de Washington Heights, su hogar, un lugar que rebosaba vida. Un recurso al que Chu y la guionista Quiara Alegría Hudes vuelven a recurrir a lo largo de la película, ya que el relato de Usnavi de las historias del bloque, contenidas en un único verano consumido por la ola de calor, proporciona un marco para el resto de la película. Usnavi, un dominicano propietario de una bodega en la esquina, habla de su sueño de dejar Washington Heights por la República Dominicana, entrelazando los sueños de sus amigos y familiares, junto con el aburguesamiento de su barrio. Al final de la película, de casi 150 minutos, los deseos de algunos personajes se hacen realidad, mientras que los de otros se quedan cortos.

Explicación del final de En un barrio de Nueva York

Hacia el final de la película, Usnavi consigue finalmente su cita con Vanessa (Melissa Barrera), y comparten su primer beso después de que él se haya mudado de su apartamento. Su Abuela (y la del barrio), Claudia (Olga Merediz), ha muerto durante el apagón después de que su corazón fallara. Su primo, Sonny (Gregory Díaz IV), ha entrado en el proceso de solicitud de DACA, con la esperanza de obtener una tarjeta verde para ir a la universidad y convertirse en ciudadano estadounidense. Pero Usnavi ha decidido volver a la República Dominicana para salvar el negocio de su padre junto a la playa, una propiedad destrozada y arruinada en la orilla.

Entra en la bodega la mañana de su vuelo y descubre que Sonny y Graffiti Pete (Noah Catala) han pintado las paredes con la playa de su padre, y Vanessa ha transformado el espacio en su taller, mostrando nuevos diseños hechos con los viejos trapos de graffiti de Pete. Cancela su vuelo. Se queda en el barrio para siempre, comprometido con este bloque que siempre ha sido su hogar.

Sin embargo, los sueños de Vanessa parecen hacerse realidad, ya que se muda a la calle 4 Oeste en el centro de Manhattan. Nina (Leslie Grace) ha vuelto a Stanford para su segundo año, decidida a encontrar una comunidad y volver con las herramientas necesarias para ayudar a los soñadores de Washington Heights y de todo el condado. Benny (Corey Hawkins) y Usnavi deciden quedarse en el bloque para asegurarse de que no se pierdan sus historias ni su historia compartida.

Sin embargo, la película termina años más tarde, cuando descubrimos que Usnavi hablaba con estos niños, incluida su hija, en su bodega con la pintura de la playa detrás de él. Él y Vanessa se han casado, y viven en Washington Heights, jugando y bailando en el agua que rocía las bocas de incendio, contemplando un barrio que ha cambiado con cada año. Es un final apropiado para una historia llena de tanta alegría. El sueño de Usnavi se ha hecho realidad: ha encontrado su isla, su lugar y su hogar para la eternidad.