La historia se desarrolla en La Habana, Cuba, en 1979. David (Vladimir Cruz), es rechazado por Vivian, que se casa con un hombre mayor y más rico. Se revela que es un estudiante universitario cuando conoce a Diego (Jorge Perugorría), un artista gay descontento con la actitud del régimen castrista hacia la comunidad LGBT, así como con la conceptualización censurada de la cultura. El homófobo compañero de clase de David, Miguel (Francisco Gattorno), planea utilizar a David para espiar a Diego, una persona a la que ven como aberrante y peligrosa para la causa comunista; Diego, por su parte, inicia la amistad con intenciones sexuales, pero David rechaza en su mayoría sus avances.

Aunque al principio a David le molesta la idea de ser el "bebé" de Diego, decide hacerlo para transmitir información a Miguel. En el proceso de espionaje, ambos entablan una tenue amistad y David deja claro que su relación será platónica. Nancy, una "vigilante" que vive encima de Diego, intenta suicidarse al llegar David un día, y él acaba donando sangre para que ella pueda recuperarse. A medida que David pasa más y más tiempo con Diego, discute con él sobre el comunismo, la sexualidad y lo que es verdaderamente revolucionario. Después de informar constantemente de sus actividades a Miguel, David acaba estallando, diciendo a Miguel que Diego tiene principios a pesar de su sexualidad. Vivian intenta reconectar con David y comenzar un romance, pero él finalmente rechaza sus avances. David comienza a dar más muestras de afecto por Diego, comprándole flores y colocando iconos marxistas en la habitación de Diego, y dejándole leer su manuscrito.

En una trama secundaria, Diego y Germán, su artista protegido y pareja sexual, no pueden exponer toda su colección de obras. En este proceso, los dos se pelean y Diego envía una carta furiosa a los conservadores del museo de Cuba. Esto provoca su despido y la imposibilidad de encontrar trabajo fuera de las labores manuales debido a su inclusión en la lista negra del gobierno. Diego se lo cuenta a Nancy, que ha desarrollado un interés romántico por David. En un gesto de amistad hacia ambas partes, decide emparejar a Nancy y David, y éste pierde su virginidad con Nancy. En los días siguientes, Miguel se presenta en el apartamento de Diego, acusando a David de ser homosexual.

Diego decide finalmente abandonar el país, pero es incapaz de mantenerlo en secreto ante David. Le confiesa su amor por David, y le revela que fue el hecho de que Diego no desmintiera los rumores de que tenía una relación con David lo que provocó la falsa "salida" de David como gay. A pesar de esto, David abraza a Diego con un abrazo, dejando su futura relación ambigua.