Final de Ida
(2013)
Final de Ida (2013)
Título original: Ida
Sinopsis
Años 60, Polonia. Una joven ilusionada con la búsqueda de la fé y la religión, esta a punto de tomar sus votos y convertirse en monja, aquello que siempre ha deseado. Se ha preparado duramente durante largos años y convertida en una novicia modelo decide entregarse totalmente a su religión. Todo cambia en el momento en el que se entera de un secreto que atormentaba a toda su familia. Sus antepasados se vieron envueltos durante la ocupación nazi con terribles consecuencias, ante tales acontecimientos decide emprender una larga lucha para conocer la verdad.
Paweł Pawlikowski
Director
Paweł Pawlikowski
Escritor
Kristian Eidnes Andersen
Compositor
Ryszard Lenczewski
Fotógrafo
Eric Abraham
Productor
Reparto principal

Jerzy Trela

Agata Trzebuchowska

Agata Kulesza

Dawid Ogrodnik

Joanna Kulig

Dorota Kuduk
Como acaba Ida
Polonia, 1962. Anna es una joven huérfana que vive en un convento, a punto de hacer sus votos. Su madre superiora la convence para que visite a su único pariente vivo, su tía Wanda, que nunca ha intentado ponerse en contacto con ella en el pasado. La tía, apodada "Bloody Wanda", es una jueza que ha enviado a la pena de muerte a decenas de partisanos no comunistas del AK. Ahora es una mujer deprimida y amante del alcohol que busca migajas de amor. El encuentro entre las dos mujeres marca el inicio de un viaje para descubrirse mutuamente, pero también los secretos de su pasado. Anna descubre que es judía y que su verdadero nombre es Ida.
La revelación de sus orígenes la lleva a buscar sus raíces y a encontrar los cuerpos de sus padres, muertos durante la Segunda Guerra Mundial. La niña recibe la ayuda de su tía, que localiza a Szymon, el hombre que había escondido a sus padres y al hijo del juez durante la guerra para protegerlos de los nazis por ser judíos. Wanda, tras visitar al ahora anciano y enfermo, revela a su sobrina que había confiado su hijo a su hermana para que se uniera a la resistencia. Mientras el juez acusa al anciano de eliminar a los tres, el hijo de Szymon, Feliks, se presenta. Éste llega a un acuerdo con Ida y dice estar dispuesto a mostrarle el lugar donde está enterrada su familia, siempre y cuando la tía deje en paz a su padre y a él mismo, para poder seguir viviendo en la casa de los padres de la chica, de cuya propiedad se ha apropiado ilegalmente.
Lleva a las dos mujeres a un bosque y cava en el lugar donde los cadáveres fueron enterrados años atrás. Al encontrar los restos de sus padres y de su hijo, Ida le pregunta al hombre por qué la perdonaron, y él le confiesa que los mató por miedo a los nazis y que la perdonó a ella porque, a diferencia de su primo, que estaba circuncidado, era demasiado joven para ser identificada como judía. También le cuenta que la había confiado al párroco del pueblo, que a su vez la había confiado a las monjas del convento donde se había criado. Las dos mujeres recogieron los restos de sus familiares y los llevaron a Lublin, donde los enterraron en la tumba familiar. Después de esto, la tía, profundamente conmocionada por la terrible verdad que ha aprendido, lleva a Ida de vuelta al convento. Wanda, ahora obsesionada por el alcohol y los remordimientos, se suicida poco después.
Mientras tanto, Ida no está segura de su elección religiosa y vuelve a casa de su tía. Decide probar sus hábitos, es decir, se viste como su tía, fuma, bebe alcohol y se entrega a un joven saxofonista que conoció durante la búsqueda. Ida se ve entonces obligada a elegir entre la religión, que la salvó durante la ocupación nazi, y la vida en el mundo fuera del convento. Finalmente, Ida, tras pasar una noche con el chico y perder la virginidad, se viste de nuevo con ropa religiosa, hace la maleta y se marcha al convento.