Final de Il demone di Laplace

(2017)
Final de Il demone di Laplace

Título original: Il demone di Laplace

21/07/2017 (ES)Misterio, Suspense, Terror, Ciencia ficción105 min
Dónde ver la película Il demone di Laplace online

Sinopsis

Un grupo de científicos logra calcular en cuantas piezas puede quedar un vaso en caída libre al llegar al suelo. Atraído por ese experimento, un misterioso profesor los invita a su mansión para conocer más sobre sus estudios. Pronto se dan cuenta de que están involucrados en una investigación en la cual desempeñan un papel fundamental y terrorífico.

Giordano Giulivi

Director

Giordano Giulivi

Productor

Reparto principal

Silvano Bertolin

Silvano Bertolin

Ferdinando D'Urbano

Ferdinando D'Urbano

Duccio Giulivi

Duccio Giulivi

Carlotta Mazzoncini

Carlotta Mazzoncini

Simone Moscato

Simone Moscato

Walter Smorti

Walter Smorti

Como acaba Il demone di Laplace

El capitán de barco Alfred Algel Narracott escolta a Isacc Bradbury y su equipo de investigación a una isla privada donde fueron invitados por el científico solitario Profesor Cornelius, a quien nadie ha conocido en persona. El equipo de Isaac, cuyos experimentos les permiten predecir con precisión el número de pedazos en los que se romperá un cristal que caiga, está formado por Bruno Gutiérrez, Sophia Brent, Roy Lombard, Karlheinz von Schach, Jim Bob y Herbert MacGuffin.

Dentro de la mansión de la cima de la montaña de Cornelius, el grupo encuentra un duplicado exacto en miniatura de la casa laberíntica que funciona con un complicado sistema de engranajes mecánicos. Para sorpresa de todos, ven que cada uno está representado dentro del modelo de la mansión por un peón de ajedrez que imita sus movimientos en tiempo real.

El profesor Cornelius aparece en la sombra en una cinta VHS para revelar que todos están participando en un experimento. Cornelius añade que el ascensor que tomaron desde el suelo estará bloqueado hasta el amanecer, atrapando a todos dentro de la mansión durante la noche.

Herbert desaparece. El grupo se da cuenta de que su peón también ha desaparecido del modelo.

Después de adelantar y rebobinar para verificar que están viendo una cinta de vídeo pregrabada, Cornelius continúa hablando y respondiendo a preguntas basadas en lo que sabía que se le preguntaría y cuándo. Cornelius explica que desarrolló una fórmula matemática capaz de predecir el comportamiento humano y diseñó el experimento de la mansión para probar su teoría.

Sophia les cuenta a los demás sobre el "Demonio de Laplace", que es una superinteligencia teórica capaz de comprenderlo todo. Sophia se pregunta si Cornelius pudo haber descubierto una forma de convertirse en el demonio figurativo.

Roy lleva a Bruno a pedir ayuda en una radio CB en el ático. Isaac, Karl, Sophia y Alfred observan el modelo de la mansión mientras una pieza de ajedrez de la reina aparece en la torre para perseguir a los peones de Roy y Bruno. La reina arrincona uno de los peones, lo abre para exponer un interior hueco y consume el peón.

Roy regresa solo para decir que no está seguro de lo que vio que le pasó a Bruno. Roy afirma que Bruno y Herbert fueron asesinados por algo escondido en la casa como parte de una elaborada trampa mortal creada por Cornelius.

Alfred sale de la habitación en un pánico paranoico. Los otros miran el modelo de la mansión mientras la reina consume el peón de Alfred.

Karl observa que la reina aparece a intervalos regulares cuando se desenrolla un cierto engranaje del modelo. Karl señala que dado el ritmo de aparición de la reina, todos los del grupo estarán muertos antes de que la mansión se abra al amanecer.

A través de la cinta de video, Cornelius confirma que la reina está programada para consumir a todos uno por uno. Cornelius explica que él no es el Demonio de Laplace, pero su fórmula sí lo es. Habiendo encontrado una fórmula capaz de predecir el futuro, Cornelius afirma que no tuvo otra opción que implementar el experimento que las matemáticas le revelaron. Roy saca la cinta de la videocasetera insistiendo en que nadie debe volver a verla.

El grupo discute los posibles planes y teorías para superar a la reina como peones. Cuando ven a la reina aparecer en la habitación con ellos en el modelo, todos huyen, aunque Sophia se queda atrás. Sophia ve que la reina es en realidad un ataúd mecanizado justo antes de que la capture.

A partir de las fotos que Jim Bob tomó mientras huía, Roy, Isaac y Karl también ven que la reina es un ataúd mecánico. Jim Bob teoriza que deben actuar irracionalmente para combatir el ataúd para confundir las matemáticas de Cornelius. Karl disputa esto afirmando que cualquier pensamiento consciente puede ser predicho. Roy propone que dejen de pensar y comiencen a actuar sin estrategia.

Karl reproduce en privado la cinta VHS para comunicarse con Cornelius. El ataúd se lleva a Karl.

A través de la cinta, Cornelius manipula la culpa de Isaac en cuanto a la responsabilidad de sus investigadores muertos. Cornelius le da a Isaac una oportunidad de redimirse, que Isaac aprovecha permitiendo que el ataúd lo mate. El ataúd también consume a Jim Bob.

Después de seguir un pasaje secreto que revela que la mansión es un conjunto, Roy encuentra un guión mecanografiado que detalla todo lo que se hizo y dijo hasta que Roy encontró el informe. Cuando Roy se da cuenta de quién estaba realmente detrás del experimento, el ataúd viene a llevárselo.

Karl emerge de un pasaje secreto. Karl brinda por Cornelius en la cinta de video. Cornelius sale de las sombras para revelar que en realidad es Karl en la cinta grabada dos semanas antes.

Cornelius le recuerda a Karl que aplicar la fórmula a las acciones personales las pone en un bucle paradójico. Cornelius también le recuerda que para que el experimento tenga éxito, Karl tendrá que entrar en el ataúd por su cuenta porque eso es lo que la fórmula predijo.

Finalmente, enfrentado a tener que matarse a sí mismo como el paso final requerido, Karl duda. Cornelius le recuerda a Karl que si no muere voluntariamente, se demostrará que su fórmula es incorrecta.

Karl tira un vaso al suelo con frustración, pero el vaso no se rompe. Cornelius menciona que el vidrio se rompió en un número específico de pedazos, lo cual no sucedió. Karl contempla que su trabajo puede haber sido en vano, pero se mete en el ataúd de todos modos. Después de que la tapa se cierra, el vidrio se rompe. En la cinta, Cornelius/Karl entrega un mensaje a los espectadores de que su experimento de la mansión demostró que el libre albedrío es una ilusión.