Iris Doriot, una bella parisina de 30 años, convence a un desconocido para que la ayude a fingir su propio secuestro con el fin de dejar a su marido, Antoine, y comenzar una nueva vida. Max López, un mecánico endeudado, accede a la trama tras arreglar su coche. Iris desaparece de la calle después de comer con su marido, un rico banquero. Iris se esconde en un piso vacío que vigila para un amigo. Max la ata y hace una foto para enviársela a su marido, junto con una petición de 500.000 euros.

Aunque le dicen que no llame a la policía, Antoine lo hace de todos modos. Intervienen su teléfono y ponen vigilancia en la estación de tren donde Max le dijo a Antoine que llevara el dinero. A pesar de que la policía no está visible, Max duda y sube al tren en lugar de recoger el dinero de Antoine, que se queda en el andén como le ha indicado la policía.

Esa noche, Max regresa a la casa y encuentra a Iris muerta en la cama, con una herida en la cabeza, justo cuando llega la policía. Max esconde rápidamente su cuerpo en una manta. La policía explica que los vecinos llamaron porque oyeron a una mujer gritando en el piso, pero Max consigue convencerles de que su mujer se fue tras una discusión. Esa noche entierra el cuerpo de Iris, aún envuelto en una manta, en el bosque.

Los detectives Nathalie y Malek sospechan del secuestro, pero siguen investigando a quien pueda tener algún rencor contra el banco. Esto les lleva hasta Max, que tiene antecedentes policiales además de que su casa está embargada. Max niega tener nada que ver, pero más tarde ve una noticia sobre la desaparición de Iris Doriot. Se sorprende al ver que la foto que se muestra no es la misma mujer que él conocía como Iris, sino una mujer de edad similar con ojos marrones. Presa del pánico, vuelve al bosque y desentierra el cadáver, que es el de la misma mujer que aparece en la televisión.

Mientras tanto, la mujer que Max conocía como Iris llega al banco, donde Antoine la reprende por aparecer. A ella le preocupa que Max acuda a la policía, pero Antoine le asegura que le han tendido una trampa tan buena que no dirá nada. Max sigue abiertamente a Antoine hasta un exclusivo club sexual de alto nivel para fetichistas, donde la falsa Iris está actuando. Se revela que su nombre es Claudia. Un flashback revela que después de que Max atara a Claudia y abandonara el piso, ésta se liberó y arrastró el cadáver de Iris, en un estado de rigor mortis avanzado, hasta la cama.

Tras hablar con el psiquiatra de Iris, la policía vuelve a interrogar a Antoine y le pregunta por su problemática vida sexual. Admite que le gusta el sadomasoquismo y que contrata prostitutas, ya que su mujer no tenía ningún interés. Antoine, nervioso por la línea de interrogatorio de la policía, llama a Max y queda con él. Le dice que le han tendido una trampa porque es un fracasado, pero que no esperaban que sacara el cadáver del piso. Antoine le dice que si se atribuye la muerte de Iris, toda su deuda quedará anulada.

En cambio, Max secuestra a Claudia. En un flashback, se revela que Iris siguió a Antoine a su sesión de sadomasoquismo, donde atacó a Claudia, que la mató en defensa propia. Mientras Claudia está atada, Max vuelve a exigir 500.000 euros a Antoine, que no tiene más remedio que darle el dinero.

Max llama a Antoine y le dice que puede encontrar a Claudia en el piso, pero en su lugar la lleva a un hotel, donde tienen relaciones sexuales. Cuando Antoine llega al piso, descubre el cadáver de Iris. Se lleva el cuerpo a su castillo de Normandía y cava una tumba, sin saber que hay vigilancia policial. La policía llega cuando Antoine se dispara en la cabeza, cayendo en la tumba abierta sobre Iris.

A la mañana siguiente, Max y Claudia se separan, repartiéndose el dinero a partes iguales.