Jerry Maguire es un lustroso agente deportivo de 35 años que trabaja para Sports Management International (SMI). Después de que las críticas del hijo de un jugador lesionado desencadenen una epifanía que cambia su vida, escribe una declaración de intenciones sobre la deshonestidad percibida en el negocio de la gestión deportiva y su deseo de trabajar con menos clientes para producir una relación personal mejor y más cuidadosa con ellos. A su vez, la dirección de SMI envía a Bob Sugar, el protegido de Jerry, a despedirlo. En consecuencia, Jerry y Sugar llaman cada uno a todos los clientes de Jerry para intentar convencerles de que no contraten los servicios del otro. Jerry habla con el receptor de los Arizona Cardinals, Rod Tidwell, uno de sus clientes que está descontento con su contrato. Necesita un contrato de 10 millones de dólares para que su familia pueda vivir. Jerry le informa de que si se lesiona para la temporada, no recibirá dinero de los Cardinals. Rod pone a prueba la determinación de Jerry a través de una larguísima conversación telefónica, mientras Sugar convence al resto de los clientes de Jerry para que se queden con SMI.

Al salir de la oficina, Jerry anuncia que va a fundar su propia agencia y pregunta si alguien quiere unirse a él, a lo que sólo accede Dorothy Boyd, madre soltera de 26 años. Frank "Cush" Cushman, una superestrella del quarterback que espera ser el número uno en el Draft de la NFL, inicialmente también se queda con Jerry después de que éste haga una visita a la casa de los Cushman. Sin embargo, Sugar convence a Cushman y a su padre para que firmen con SMI en lugar de con Jerry la noche antes del draft, posiblemente por el hecho de que el padre de Cush es racista.

Tras una discusión, Jerry rompe con su descontenta prometida Avery. Entonces se dirige a Dorothy, acercándose a su hijo pequeño, Ray, y comienza una relación con ella. Dorothy contempla la posibilidad de mudarse a San Diego, ya que tiene una oferta de trabajo segura allí; sin embargo, ella y Jerry se casan. Jerry concentra todos sus esfuerzos en Rod, ahora su único cliente, que resulta ser muy difícil de satisfacer. Durante los meses siguientes, los dos se critican mutuamente con dureza, ya que Rod afirma que Jerry no se esfuerza lo suficiente por conseguirle un contrato, mientras que Jerry afirma que Rod no demuestra ser digno del dinero que pide; un punto de discordia es que Rod no es muy simpático y se muestra distante ante los fans. Rod acepta el consejo de Jerry para demostrar que es digno de su contrato. Rod juega bien y su equipo gana. El matrimonio de Jerry con Dorothy se deteriora y se separan.

Durante un partido de Monday Night Football entre los Cardinals y los Dallas Cowboys, Rod juega bien, pero parece sufrir una grave lesión cuando atrapa un touchdown ganador, asegurando un puesto para los Cardinals en los playoffs. Se recupera y baila para el público que lo aclama. Después, Jerry y Rod se abrazan delante de otros atletas y agentes deportivos y muestran cómo su relación ha pasado de ser estrictamente empresarial a ser muy personal, que era uno de los puntos que Jerry planteaba en su declaración de intenciones. A continuación, vuela de vuelta a casa para encontrarse con Dorothy, diciéndole que la ama y que la quiere en su vida, lo que ella corresponde. Rod aparece en el programa deportivo de Roy Firestone. Sin saberlo, Jerry le ha conseguido un contrato de 11,2 millones de dólares con los Cardinals, lo que le permitirá terminar su carrera de futbolista profesional en Arizona. El emocionado Rod procede a dar las gracias a todo el mundo y extiende un cálido agradecimiento a Jerry. Jerry habla con varios otros atletas profesionales, algunos de los cuales han leído su anterior declaración de intenciones y respetan su trabajo con Rod.

Ray lanza una pelota de béisbol al aire, sorprendiendo a Jerry, que luego discute con Dorothy la posible carrera futura de Ray en la industria del deporte.