Dovidl Rappaport, un niño polaco de 9 años que perdió a sus padres y hermanos en la Segunda Guerra Mundial, es también un prodigio del violín. La familia Simmonds lo adopta y se lo lleva a Inglaterra. Su hijo Martin empieza a establecer vínculos con su nuevo hermano adoptivo, ya que le gusta que Dovidl (anglicismo David) toque el violín.

David sigue practicando el violín sin dejar de recordar a su familia biológica. Pasan los años y David y Martin ya tienen 21 años. Sólo queda un día para un concierto de David, cuando éste desaparece misteriosamente con su violín.

Se revela que David se había quedado dormido en un autobús y visita una comunidad judía polaca en Stoke Newington, preguntándoles si su familia sigue viva. Luego lo llevan a una sinagoga, donde se anuncia una lista de personas con el apellido Rapaport que murieron durante la Segunda Guerra Mundial (en forma de canción, para que sea más fácil de recordar). Tras descubrir que ninguno de sus familiares ha sobrevivido, David se derrumba.

Años más tarde, hacia 1986, Martin tiene ahora 56 años y está casado. Se entera de la existencia de un violinista que toca con el mismo patrón que su hermano David, desaparecido hace unos 35 años. Martin parte entonces hacia Polonia para encontrar a su hermano.

Después de conocer al antiguo amor de David, que dice que éste se fue en un avión pero le dijo adónde iba, Martin llega a Nueva York, donde encuentra a David, casado y con hijos. Martin está furioso con David e intenta convencerle de que actúe en un concierto. David se niega al principio, pero luego acepta con dos condiciones (no reveladas en la escena).

Dos meses más tarde, Martin y su mujer asisten al concierto, en el que David toca primero con una orquesta y luego tiene una actuación en solitario, en la que interpreta la "Canción de los nombres", recordando a su familia. A continuación, Martin recibe una carta de David en la que le dice que debe pensar en el segundo como si estuviera muerto y que no deben volver a verse. La película termina con Martin leyendo el Kaddish, habiendo aceptado a regañadientes que David ha muerto para él.