Final de La mansión encantada
(2003)
Final de La mansión encantada (2003)
"Compruebe su pulso en la puerta ... si tiene uno."
Título original: The Haunted Mansion
Sinopsis
Jim Evers (Eddie Murphy), un agente inmobiliario adicto al trabajo, arrastra a su familia a la enorme y espantosa mansión Gracey con la intención de reconstruirla. Pero nada más llegar, se presentan ante la familia 999 macabros y burlones fantasmas que no están dispuestos a marcharse mientras no se terminen las obras. Jim se verá obligado a conjurar el maleficio y, al mismo tiempo, descubrirá cuánto le necesita su familia.
Rob Minkoff
Director
Mark Mancina
Compositor
Remi Adefarasin
Fotógrafo
Don Hahn
Productor
Reparto principal

Eddie Murphy

Marsha Thomason

Terence Stamp

Nathaniel Parker

Jennifer Tilly

Dina Spybey-Waters
Como acaba La mansión encantada
Jim y Sara Evers son exitosos agentes inmobiliarios con dos hijos, Michael y Megan. Adicto al trabajo y con poco tiempo para su familia, Jim se pierde su aniversario de bodas y trata de enmendarlo proponiendo unas vacaciones en el lago cercano. Sara se pone en contacto con los ocupantes de la Mansión Gracey, situada en el cercano pantano; Jim, deseoso de hacer un trato tras enterarse de dónde está la mansión, lleva a su familia allí, conociendo a su propietario, Edward Gracey, a su mayordomo Ramsley y a sus otros sirvientes; la criada Emma y el lacayo Ezra.
Cuando una tormenta inunda el río cercano, Gracey permite a la familia pasar la noche. Ramsley lleva a Jim a la biblioteca para discutir el trato con Gracey, pero Jim queda atrapado en un pasadizo secreto. Gracey le da a Sara un recorrido por la mansión, hablando de su pasado y de la muerte de su "abuelo" tras el suicidio de su amante, Elizabeth Henshaw. Megan y Michael siguen un orbe espectral hasta el ático, donde encuentran el retrato de una mujer que tiene un parecido casi idéntico al de Sara. Emma y Ezra aparecen e identifican a la mujer como la difunta Elizabeth.
Mientras tanto, Jim se encuentra con Madame Leota, el fantasma de una gitana cuya cabeza está encerrada en una bola de cristal. Se encuentra con Emma, Ezra y sus hijos, y vuelve con Leota para obtener respuestas sobre el parecido de Elizabeth con Sara. Se revela entonces que los habitantes de la mansión son fantasmas, maldecidos hace un siglo por las prematuras muertes de Elizabeth y Gracey, y que sólo pueden entrar en el más allá cuando los amantes se reúnen; se cree que Sara es la reencarnación de Elizabeth. Leota envía a los Evers al cementerio de la mansión para encontrar una llave que revele la verdad sobre la muerte de Elizabeth. En una cripta bajo un mausoleo, Jim y Megan encuentran la llave, pero sin querer molestan a sus residentes no muertos. Sin embargo, escapan con la ayuda de Michael, que supera su aracnofobia.
Leota los conduce a un baúl en el ático, que Jim abre para encontrar una carta que Elizabeth escribió a Gracey, revelando que lo amaba de verdad y que quería casarse con él, lo que indica que no se suicidó como todos creían. Ramsley aparece entonces y revela que asesinó a Elizabeth para evitar que Gracey abandonara su herencia, ya que creía que su relación era inaceptable. Para ocultar la verdad, Ramsley atrapa a los niños en un baúl y echa literalmente a Jim de la mansión. Cuando Gracey y Sara se reúnen en el salón de baile, ella se confunde cuando él le pregunta si le reconoce, y él insiste en que es su amada Elizabeth. La sala se llena de fantasmas que bailan cuando Gracey revela su ser fantasmal, pero Sara niega ser Elizabeth. Esto hace que Gracey se lo piense mejor, pero Ramsley insiste en que Sara es Elizabeth y, con el tiempo, lo recordará. Ramsley entonces chantajea a Sara para que se case con Gracey a cambio de la seguridad de sus hijos.
Animado por Leota, Jim consigue volver a entrar en la mansión, rescatar a sus hijos y detener la boda de Sara y Gracey. Le entrega a Gracey la carta de Elizabeth y el crimen de Ramsley queda al descubierto. Mientras Gracey se enfrenta airadamente a Ramsley, éste se enfurece hipócritamente ante el aparente egoísmo de su amo por amar a Elizabeth e invoca a los espectros para que ataquen al grupo. Sin embargo, con la verdad revelada, un ente ardiente emerge de la chimenea del salón de baile y arrastra a Ramsley al infierno para enfrentar el castigo eterno. Ramsley intenta llevarse a Jim con él, pero es salvado por Gracey. Sara se derrumba, habiendo sido envenenada por Ramsley durante la ceremonia de la boda, pero el orbe espectral aparece y posee a Sara. El orbe se revela como el fantasma de Elizabeth, que sólo pudo liberarse de su forma actual una vez revelada la verdad, y agradece a Jim por salvarla. Elizabeth y Gracey se reúnen mientras Sara es revivida.
Con la maldición finalmente levantada, Gracey da a los Evers la escritura de la mansión y parte hacia el Cielo con Elizabeth, Emma, Ezra y los demás habitantes de la mansión. Los Evers atraviesan la calzada del lago Pontchartrain para disfrutar de unas auténticas vacaciones, acompañados por Leota y cuatro bustos cantores que encontraron mientras buscaban el mausoleo, atados a la parte trasera de su coche.