Final de La mejor oferta
(2013)
Final de La mejor oferta (2013)
Título original: La migliore offerta
Sinopsis
Virgil Oldman, un hombre solitario y excéntrico, es un experto en arte y un agente de subastas muy apreciado. Su vida transcurre al margen de cualquier sentimiento o emoción hasta que conoce a una hermosa y misteriosa joven que le encarga tasar y vender las obras de arte heredadas de sus padres. Esta joven, que sufre una extraña enfermedad psicológica que la mantiene aislada del mundo, transformará para siempre la vida de Virgil.
Giuseppe Tornatore
Director
Ennio Morricone
Compositor
Fabio Zamarion
Fotógrafo
Arturo Paglia
Productor
Reparto principal

Geoffrey Rush

Jim Sturgess

Sylvia Hoeks

Donald Sutherland

Maximilian Dirr

Philip Jackson
Como acaba La mejor oferta
Virgil Oldman se aísla del mundo de todas las maneras posibles: no sólo no invita a nadie a su lujosa casa, sino que nunca se quita los guantes, creando una barrera entre él y el mundo, incluso a nivel táctil. Sólo hay dos lugares en los que se siente completamente cómodo: la subasta y la galería de su casa.
La galería de arte de Oldman es tan extraña como él. En primer lugar, está escondida en las entrañas de su apartamento, y nadie la visita nunca. En lugar de deleitar a la gente, los hermosos cuadros languidecen encerrados. En segundo lugar, la colección de cuadros se distingue por una cierta unilateralidad: contiene exclusivamente retratos de mujeres jóvenes y bellas, pero pertenecientes a los mejores artistas de todas las épocas.
La selección de cuadros explica en gran medida la personalidad del coleccionista. En este caso, el espectador comprende que Virgil no colecciona cuadros por amor al arte: esta galería es su vida personal, y las bellezas de los retratos sustituyen a las mujeres reales de carne y hueso. Como admite Oldman en una conversación con Robert, la veneración por las mujeres coexiste en él con el miedo a ellas y la incapacidad para desentrañarlas. En otras palabras, las representantes del sexo opuesto son criaturas oscuras para él, y o bien las idealiza, soñando con bellas damas en los retratos, o bien no ve a las mujeres en absoluto, hasta que Claire Ibbetson aparece en su vida.
¿Qué sentido tiene el comportamiento de Claire?
La misteriosa desconocida irrumpe en la bien establecida y protegida vida del subastador, primero como una voz llorosa en un receptor telefónico, luego como una amante invisible de una villa, y su comportamiento confunde no sólo a Oldman, sino también al espectador.
A primera vista, Claire actúa de forma ilógica: por ejemplo, hace que Virgil, que llega a la villa por primera vez, se quede parado bajo la lluvia frente a una puerta cerrada. Pero en realidad, el comportamiento de la señorita Ibbetson no es sólo deliberado, sino que es una ilustración de referencia de la técnica manipuladora "swing emocional".
La esencia de esta técnica radica en que el objeto de la manipulación es acariciado y acercado, y luego insultado y repelido, y su objetivo principal es un banal "divorcio por emociones". Claire necesita sacar a Virgil de su caso, para privarle del equilibrio psicológico, y por ello le halaga ("Papá dijo que Virgil Oldman es el mejor"), luego le encierra con una verja cerrada; le dice que tienen mucho en común, luego le insulta repentinamente por el pelo teñido; le entrega las llaves de la villa, luego cambia las cerraduras.
Cuando Virgil, por primera vez en su vida, acude a su cumpleaños con un ramo de flores, Claire, en lugar de agradecer, grita y acusa de engaño, etc. Además, un pequeño juego de escondite y "latigazos de piedad" - y Oldman deja de controlar la situación: sin saberlo, estaba completamente involucrado en el escenario de otra persona.
¿Por qué el protagonista es tan imprudente?
Algunos espectadores se hacen una pregunta lógica: ¿por qué una persona tan experimentada en los negocios no contrató a un detective para averiguar qué es la misteriosa señorita Ibbetson? Efectivamente, en los negocios, Virgil, a diferencia de su vida personal, no es en absoluto un neófito.
El hecho es que, curiosamente, el canoso subastador es algo así como un adolescente. No conoce el amor real ni la psicología de las mujeres, anhela con el deseo, espía, consulta a los amigos, sueña con bellezas pintadas.
Por otra parte, un adolescente sigue siendo medio niño que cree en los cuentos de hadas. Claire invita a Virgil, que se ha enamorado, a representar el papel de un príncipe de cuento que quita el maleficio a una princesa encantada que no se atreve a salir a la calle. Este papel es muy del agrado del subastador: ennoblece enormemente la situación poco apetecible en la que se ha visto envuelto el anciano con la joven. Y no hay lugar para los detectives en un cuento de hadas. Qué detectives: un simple pensamiento de que los sentimientos pueden ser falsos, y que llega al viejo enamorado con gran dificultad.
No es de extrañar que cuando Oldman no sólo descubre que toda su colección ha desaparecido, sino que se da cuenta de que le ha robado su "mujer amada" y "amiga", casi se muere en el sentido literal de la palabra.
¿Cuál es el significado de la imagen de Robert?
Aunque la película no ofrece una respuesta precisa a la pregunta de quién ideó el astuto plan para privar a Virgil de sus tesoros, no cabe duda de que Robert, un joven mecánico al que el subastador consideraba su amigo, tuvo algo que ver. Robert es el opuesto vivo de Oldman, y no sólo en términos de edad. Oldman huye del mundo, Robert está inextricablemente unido a él. Oldman no conoce a las mujeres, a ellas les gusta Robert y entabla fácilmente una relación.
Y, lo que es más importante, si para Oldman la vida real es sustituida por el arte, para Robert la vida y el arte son inseparables: consigue hacer de su biografía una novela de aventuras. Robert es la encarnación de un enfoque pragmático, realista y creativo de la vida, pero sus talentos son demasiado versátiles.
¿Qué significa el androide?
Durante su primera visita a la villa, Claire encuentra un extraño detalle que resulta ser un elemento de un androide, un viejo autómata que imita a una persona. Dado que durante casi toda la película Virgil trae a Robert partes de esta máquina, y luego el subastador encuentra el androide terminado en una galería vacía, es obvio que esta línea argumental merece una consideración aparte.
En primer lugar, el androide forma parte del juego de Claire y Robert con el subastador, una especie de rompecabezas cuyo significado sólo quedará claro cuando todos los elementos encajen. Al mismo tiempo, como Virgil aporta constantemente nuevos detalles a Robert, esto ayuda a este último a controlar a la víctima: el androide es también una forma de mantener contactos regulares.
Y por último, es una sutil burla a Oldman, que creía que había algo de autenticidad en toda falsificación. Se le muestra un peluche mecánico, dejando claro que esta falsificación se parece tan poco a una persona viva como él.
Por cierto, la devolución del retrato de una mujer que se parece a Claire es también una burla. A Oldman se le está diciendo: vuelve a tu mundo de ilusiones y vive con una foto, no eres digno de una mujer de verdad.
¿Por qué Oldman no denunció a la policía?
La respuesta a esta pregunta es sencilla: porque la amaba. Claire es el primer, último y único amor de Oldman. Gracias a ella, el protagonista -aunque con un retraso monstruoso- se dio cuenta por fin de lo que es más importante y más valioso en la vida.
¿Qué sentido tiene la escena final?
En el final, vemos al protagonista esperando a Claire en una mesa del restaurante de Praga, del que ella le habló una vez. La gran cantidad de horas en el interior es un símbolo del tiempo que se ha ido y ha desperdiciado el protagonista. Todo el tiempo que vivimos sin amor, escondidos en el caparazón del egoísmo, lo vivimos en vano. Pero Virgil, al enamorarse, se convirtió en una persona diferente, y su vida cobró sentido.
¿Cuál es la idea principal de la película?
Por supuesto, una de las ideas principales de la película es que sólo el amor y los sentimientos dan plenitud y sentido a nuestro ser, pero también hay otra capa semántica.
Como dice D. Bykov en su poema "Life is higher than literature": "Art is a kind of dried fruit, a shrunken weight and volume, required only by those who have not seen the fruit alive" ("El arte es una especie de fruta seca, de peso y volumen encogidos, que sólo necesitan los que no han visto la fruta viva"). Sin duda, si el creador de "La mejor oferta" hubiera conocido estas líneas, habría estado de acuerdo con ellas. El arte es bello, pero nunca se puede comparar con la vida real. Por eso, el sufrimiento para Virgil es mejor que la vegetación en un caso: por fin ha empezado a vivir.