Louis Drax, un niño de 9 años, narra una serie de accidentes casi mortales, siendo el más reciente una sospechosa caída por un acantilado. A través de una serie de flashbacks, se muestran las sesiones de Louis con el psiquiatra Dr. Pérez. Otros flashbacks revelan una tensa relación entre los padres de Louis, Peter y Natalie. A pesar de que el Dr. Pérez promete que todo lo que Louis le cuente será confidencial, le cuenta a Natalie sus preocupaciones, lo que hace que ella termine las sesiones.

En el presente, un médico que examina a Louis tras su último accidente lo declara muerto. Sin embargo, después de que Louis sea trasladado a la morgue, se despierta repentinamente y es ingresado en cuidados intensivos en estado de coma. Peter, que ha desaparecido, es inmediatamente el principal sospechoso del posible intento de asesinato de Louis. El caso de Louis atrae la atención del Dr. Allan Pascal, que se convierte en el principal médico a cargo del cuidado de Louis. A pesar de que Allan está casado, él y Natalie comparten una atracción mutua, y la besa un día mientras ambos dan un paseo.

Natalie y Allan reciben cartas amenazantes en las que se les pide que se alejen el uno del otro, y el autor de dichas cartas dice ser el propio Louis. Dalton, el investigador principal del caso de Louis, cree que las cartas han sido escritas por Peter. Dalton advierte a Allan que no se involucre con Natalie, diciéndole que Peter no es el verdadero padre de Louis, y que en un momento dado Natalie intentó dar a Louis en adopción. Natalie confiesa a Allan que Louis es fruto de una violación y, a pesar de las advertencias de Dalton, ella y Allan mantienen relaciones sexuales.

Louis es visitado en el hospital por su abuela, Violet, que se da cuenta de la relación entre Allan y Natalie. Le advierte a Allan que Natalie es inestable y manipuladora. Dalton entra de repente, informando a Violet y Allan de que el cuerpo de Peter ha sido encontrado en el fondo de un acantilado, habiendo estado muerto durante varios días.

Mientras ocurre todo lo anterior, Louis sigue narrando. En algunos momentos recibe la visita de una misteriosa criatura cubierta de algas. Louis visita a la criatura en una cueva, y se revela que es la manifestación de Louis de Peter, que fue encontrado muerto en una cueva cubierta de algas.

Un día, al despertarse de una siesta, otro médico le dice a Allan que no sólo fue sonámbulo durante su siesta, sino que también le hizo una receta a Natalie, de peligrosas dosis de insulina y cloroformo. Esto, combinado con los otros sueños de Allan y las cartas sospechosas, lleva a Allan a creer que mientras duerme, Louis ha estado controlando de alguna manera a él y sus acciones. Allan informa al Dr. Pérez, que conecta a Allan a un electrocardiograma y consigue comunicarse directamente con Louis a través de la mente y la voz de Allan.

Louis revela lo ocurrido durante el picnic: Natalie trata de darle a Louis algunos dulces, pero se niega a permitir que Peter tenga alguno, lo que hace que Peter sospeche y se produzca una pelea. Louis huye al borde del acantilado, mientras Natalie y Peter le siguen y se enzarzan en una pelea, que termina cuando Natalie empuja a Peter por el acantilado hasta su muerte. Louis ve esto y camina por el borde del acantilado por su cuenta en un aparente intento de suicidio.

En ese momento, los latidos del corazón de Louis se detienen repentinamente y Allan se despierta. Mientras Allan intenta reanimarlo con un desfibrilador, se demuestra que Natalie es la responsable de los "accidentes" de Louis, habiendo hecho cosas como envenenar su caramelo, electrocutarlo mientras estaba cerca de un enchufe y asfixiarlo con una almohada. Allan consigue reiniciar el corazón de Louis mientras Natalie mira.

Tiempo después, Allan se muda tras separarse de su mujer. Visita a Natalie, que ha sido internada en un pabellón psiquiátrico bajo el cuidado del Dr. Pérez. Pérez le explica a Allan que ha diagnosticado a Natalie el síndrome de Munchausen por poderes. Se muestra que Natalie está ahora embarazada, presumiblemente del hijo de Allan.

En una narración final, Louis se plantea si estar en coma para siempre es malo, ya que le permite quedarse con su padre. La voz de Peter, sin embargo, le dice a Louis que el mundo es hermoso y que tiene que crecer y vivir su vida. Louis despierta del coma y la película termina.