Ambientada en 1978, la trama se centra en el investigador privado de Los Ángeles Carson Phillips. Éste es contratado para llevar a cabo una investigación en su ciudad natal de Texas, donde la paciente de un centro psiquiátrico Barbara Poole lleva un tiempo incomunicada, lo que tiene a su sobrina de Los Ángeles preocupada por su bienestar.

Al llegar al sanatorio, se da cuenta de que todo el personal parece nervioso cuando pregunta por ella. El Dr. Miles, el médico jefe, se muestra evasivo y le da largas durante varios días. Carson nunca llega a ver a la señora Poole.

Se encuentra con su ex, Jayne, y su hija, Becky. Becky está casada con el quarterback estrella, Happy. Una noche, durante un partido, Happy muere repentinamente y la policía sospecha fuertemente de Becky. Jayne pide ayuda a Carson.

Becky estaba siendo abusada por Happy, pero como él era el mariscal de campo estrella, la policía no lo arrestaba. El Dr. Miles mataba a los pacientes que no contaban con el apoyo económico de sus familias, incluida Barbara Poole, y cobraba el dinero de su seguridad social. Carson descubre la verdad y el Dr. Miles es asesinado a tiros por un paciente.

Carson y Jayne se reconcilian y él encuentra un frasco de pastillas contra el cáncer. Esta misma sustancia se encontró en la sangre de Happy. La acusa de "hacer cualquier cosa para proteger a su hija" y se da cuenta de que fue ella quien envenenó a Happy. Becky sale y le pregunta si ella lo hizo. Al principio Jayne lo niega todo, pero luego admite que pensó que Happy mataría a Becky y como a ella misma no le quedaba mucho tiempo de vida, no quedaría nadie para proteger a su hija. Becky la perdona.

La película termina con Carson afirmando que iba a volver a casa, luego se da cuenta de que está en casa, dando a entender que se queda con su ex y su hija en lugar de volver a Los Ángeles.