Final de Lock & Stock explicado
Eddy, el crack de las cartas y sus tres compañeros Bacon, Soap y Tom, reunieron £ 100,000 para una partida de póquer de alto riesgo con Harry the Hatchet. Harry se marca un farol y Eddy termina debiendo £ 500,000.
La verdadera intención de Harry es quedarse el bar del padre de Eddy.
Eddy y sus compañeros escuchan a la pandilla de al lado, dirigida por Dog, que habla sobre robar a una pandilla de cultivadores de marihuana. Planeando robar a la pandilla de Dog, compran dos escopetas recientemente robadas de Nick el griego, que Gary y Dean le vendieron.
Nick también hace un trato para vender la marihuana robada a Rory Breaker. Las escopetas valen una fortuna.
Resulta que la marihuana fue cultivada por una pandilla que trabaja para Rory Breaker. Gary y Dean están ansiosos por recuperar las armas porque a Harry no se le llama Hatchet por nada.
La pandilla de al lado roba a la pandilla de marihuana, y luego es robada por la pandilla de Eddy. Dog descubre que la pandilla de Eddy vive al lado y roba las drogas y las armas.
Rory Breaker y su pandilla luego visitan a la pandilla de Dog y tienen un gran tiroteo matando a casi todos excepto a Dog.
El cobrador de facturas de Harry, Big Chris, golpea a Dog y obtiene el dinero y las escopetas. Big Chris lleva las armas y el dinero a Harry. Gary y Dean entran en un tiroteo accidental con Harry y todos mueren.
La pandilla de Eddy aparece en casa de Harry y se lleva el efectivo y las armas. Dog intenta extorsionar a Big Chris pero este lo mata a golpes con la puerta de un coche. Luego recupera el dinero pero deja que la pandilla de Eddy se quede con las armas, porque sí las pagaron.
Eddy y sus compañeros deciden que lo que deben hacer es deshacerse de las armas para que no estén vinculadas a ellas. Envían a Tom a tirar las armas en el Támesis. Big Chris aparece y les da un catálogo de armas que muestra que las armas no tienen precio.
Eddy, Bacon y Soap llaman frenéticamente a Tom. Tom es visto por última vez decidiendo si contesta su teléfono o deja caer las armas de valor incalculable en el Támesis.