El agente de policía Frank Williams y su compañero novato entran en un edificio abandonado plagado de iconografía religiosa para rescatar a una mujer inmovilizada a la que han arrancado los ojos. Jacob Goodnight, un asesino en serie silencioso que quita los ojos a sus víctimas, utiliza un hacha para cortar la mano de Williams y matar al otro agente antes de que Williams dispare un tiro a la cabeza de Jacob.

4 años después - Ahora con una mano protésica, Williams trabaja como guardia en el Centro de Detención del Condado. Él y Hannah Anders supervisan un programa de trabajo para ocho delincuentes encarcelados. Los cuatro jóvenes son Russell Wolf, Richie Bernson, Michael Montross y Tyson Simms. Las cuatro jóvenes son Christine Zarate, Zoe Warner, Kira Vanning y Melissa Beudroux.

El grupo es llevado al abandonado Hotel Blackwell, donde son recibidos por la cuidadora Margaret Kane. A los jóvenes se les asigna la tarea de pasar tres días limpiando el edificio abandonado para convertirlo en un refugio para personas sin hogar.

Por la noche, Richie convence a Tyson para que le ayude a buscar en los laberínticos pasillos una caja fuerte que, según se rumorea, fue abandonada tras un incendio. Christine consuela a Kira tras un encuentro con su ex Michael. Los otros cuatro se reúnen para explorar el edificio por su cuenta.

Richie y Tyson descubren un cadáver al que le faltan los ojos poco antes de que Jacob aparezca y capture a Richie. Más tarde, Richie es asesinado cuando Jacob le saca los ojos. Hannah va a investigar la conmoción y es asesinada en el ascensor.

Kira intenta escapar del hotel, pero es tomada prisionera por Jacob. Williams, Margaret y Christine oyen a Kira luchando, pero no consiguen rescatarla a tiempo. Williams y Christine descubren entonces la espeluznante escena en el ascensor antes de reunirse con Tyson. Williams se da cuenta de que están tratando con el mismo loco al que se enfrentó cuatro años antes, y que los tatuajes en forma de cruz en los cuerpos de las víctimas potenciales son los que impiden a Jacob matar. Jacob entonces reaparece y mata a Williams con un gancho.

Russell y Melissa se separan de Michael y Zoe para tener algo de privacidad. Mientras se besan, Jacob irrumpe a través de un espejo bidireccional y ataca. Russell es asesinado mientras Melissa cae al patio donde es devorada viva por una jauría de perros callejeros.

A continuación, Jacob mata a Zoe clavándole un teléfono móvil en la garganta. A continuación, Jacob utiliza la caja fuerte que Richie estaba buscando para aplastar a Tyson.

Margaret revela a la cautiva Kira que en realidad es la madre de Jacob. Engañada por sus creencias, Margaret crió a su hijo a través de una historia de abuso religioso para convertirse en un asesino de pecadores y putas en nombre de Dios. Williams fue atraído a propósito al hotel para que Margaret pudiera vengarse de él por haber disparado a Jacob. Cuando intenta forzar a Jacob para que finalmente asesine a Kira, éste acaba arrojando a Margaret contra una pared donde su cabeza es empalada en un pincho expuesto.

Christine intenta rescatar a Kira de las garras de Jacob. Michael se une a la lucha y los tres supervivientes consiguen finalmente lanzar a Jacob a través de una ventana después de que Christine le introduzca un tubo en la cuenca del ojo. Jacob cae al suelo y aparentemente muere al romperse su corazón. En una escena del epílogo, un perro callejero pasa por allí y orina en la cuenca ocular vacía de Jacob.