Jean-Louis, un ingeniero solitario y serio, ha aceptado un trabajo en Clermont-Ferrand donde no conoce a nadie. Al asistir a una iglesia católica, ve a una joven rubia y, sin saber nada de ella, está convencido de que se convertirá en su esposa. En el café se encuentra con Vidal, un viejo amigo marxista ahora profesor universitario, que le invita a un concierto esa noche. Jean-Louis se muestra al principio reticente, pero finalmente acepta ir. Tras el concierto, cenan en un restaurante. Vidal tiene previsto visitar a un amigo la noche siguiente e invita a Jean-Louis a acompañarle. Sin embargo, Jean-Louis quiere ir a misa. Acuerdan ir a misa juntos, ya que el amigo de Vidal no estará disponible hasta después de medianoche.

Llegan al piso de Maud, una pediatra recién divorciada. Los tres hablan y beben, hasta que Maud sugiere que la nieve que cae ha hecho inseguro el viaje hasta el pueblo de montaña de Jean-Louis y que debería quedarse. Vidal, que esperaba quedarse, se marcha. Maud y Jean-Louis hablan de religión y de su vida amorosa. Ella se acomoda en la cama de matrimonio del salón y revela que se divorció de su marido porque éste tuvo una aventura con una mujer católica, mientras que ella misma tuvo un amante que murió en un accidente de coche hace un año. Cuando llega la hora de dormir, declara que la cama en la que está es la única. Se desnuda y sugiere a Jean-Louis que se una a ella bajo las sábanas. Él acaba por hacerlo, pero con la ropa puesta. Por la mañana, Jean-Louis se resiste a su propuesta de hacer el amor. Maud, inicialmente dolida, supera el rechazo y le invita a unirse a ella más tarde para dar un paseo por la nieve con sus amigos.

Justo antes de encontrarse con las amigas de Maud, ve a la chica rubia de la iglesia y, muy animado en su trato con las mujeres por su noche con Maud, se presenta con valentía. Se llama Françoise y accede a verle en la iglesia. Durante el paseo con Maud, se muestra mucho más atrevido con ella, hasta el punto de que ella tiene que contenerle. Después del paseo, Jean-Louis prueba suerte en el lugar donde conoció a Françoise y ella resulta estar allí, a punto de volver a casa. Se ofrece a llevarla a casa y se entera de que es una posgraduada en biología. Vuelve con ella a su casa de estudiante y después de un té puede pasar la noche en una habitación separada. Por la mañana, antes de ir a la iglesia, ella se niega a besarlo. Después del servicio religioso, ella admite que la nube entre ellos se debe a que ha tenido una aventura con un hombre casado.

Cinco años después, ya casados y en una playa con su hijo, los dos se encuentran con Maud. Ella dice que se ha vuelto a casar, pero que no es un éxito. Después, Jean-Louis confiesa a Françoise que salió de la cama de Maud la mañana en que la conoció, pero no da detalles sobre lo que realmente ocurrió. Entonces se da cuenta de que el amante de su mujer era el marido de Maud. Como ahora ambos son felices juntos, deciden no volver a sacar el tema. En su lugar, se van a nadar con su hijo.