Johanna le informa a Mortdecai que la pintura era falsa.

La pareja regresa a Londres para encontrar a The Duke, pero se enteran de que falleció. Su viuda les deja ir al baño y encontrar la pintura.

La pareja pone la pintura en una subasta esa noche, escondida como una falsificación debajo de una pintura familiar propiedad de Mortdecai. Fang es informado de esto y baja para recoger el dedo de Mortdecai.

Romanov y sus matones también se presentan a la subasta con Sir Graham. Mortdecai y Jock someten a los matones de Romanov antes de encontrarse con los matones de Fang.

Casi se llevan uno de los dedos de Jock en su lugar, hasta que Mortdecai coge un palo y los golpea para salvar a su amigo. Mortdecai corre a la subasta, donde Emil se ha sentado junto a Johanna con un cuchillo. Mortdecai llega y hace una gran puja hasta que Romanov lo vence. La pintura se le vende a él, dándole a Johanna un momento para rociar a Emil en la cara, y ser detenido por Martland.

Nos enteramos de que Romanov compró la falsificación incorrecta. Martland acepta que él nunca estará con Johanna, y la deja en paz. Mortdecai ha recaudado algo de dinero, pero el resto se paga por los impuestos que debía.

Al final, Mortdecai y Johanna continúan amándose y siendo fieles contra viento y marea. Acepta finalmente afeitarse el bigote si eso la hará feliz, porque haría cualquier cosa por ella. Johanna decide dejarlo quedarse.