Final de No habrá paz para los malvados
(2011)
Final de No habrá paz para los malvados (2011)
Título original: No habrá paz para los malvados
Sinopsis
Madrid, principios del siglo XXI. Un día, el inspector de policía Santos Trinidad, volviendo a casa muy borracho, se ve involucrado en un triple asesinato. Pero hay un testigo que consigue escapar y que podría incriminarlo. Santos emprende una investigación destinada a localizar y a eliminar al testigo. Mientras tanto, la juez Chacón, encargada de la investigación del triple crimen, avanza meticulosamente en la búsqueda del asesino. Santos y Chacón descubrirán muy pronto que lo que parecía un simple caso de tráfico de drogas es, en realidad, algo mucho más peligroso.
Enrique Urbizu
Director
Michel Gaztambide
Escritor
Reparto principal

Jose Coronado

Helena Miquel

Rodolfo Sancho

Juanjo Artero

Pedro Mari Sánchez

Younes Bachir
Como acaba No habrá paz para los malvados
Santos Trinidad, un policía corrupto y ex miembro del GEO (equivalente a la policía española) caído en desgracia, se va de juerga a altas horas de la noche. Le echan de un bar y exige agresivamente una copa a una camarera de otro bar a pesar de que está cerrado. El encargado intenta apaciguar la situación ofreciéndole a Trinidad una bebida gratis, pero su proximidad física es considerada demasiado invasiva por Trinidad, cuyo entrenamiento e instintos le despiertan de repente de su estupor de borracho; le rompe la nariz al encargado, el portero saca una pistola y Trinidad les dispara a cada uno de ellos. Mientras Trinidad limpia las pruebas, un testigo ocular escapa. Después de que Trinidad estudie sus carteras en busca de pistas sobre la identidad del testigo ocular, destruye todos los documentos de identificación.
Chacón y Leiva investigan el crimen. Sin ninguna forma de identificar a las víctimas, su investigación avanza lentamente, aunque inicialmente sospechan que se trata de un golpe del hampa. Tras utilizar los recursos de la policía para identificar la matrícula del testigo, Trinidad registra su apartamento y su coche. Trinidad se lleva el dispositivo GPS del hombre, que utiliza para identificar lugares comunes. Aunque intenta disfrazarse, es captado por una cámara de vigilancia. Más tarde, Trinidad sigue la pista del hombre y lo persigue hasta el metro, donde intenta matarlo, pero es apuñalado por un cómplice al que llama el testigo.
Trinidad y Chacón se dan cuenta por separado de que las víctimas de los asesinatos tenían vínculos con los cárteles de la droga colombianos. Cada uno de ellos busca a Rachid, un informante de la policía que anteriormente estuvo involucrado con los mismos grupos. Chacón, a través de sus contactos con la inteligencia antiterrorista, lo encuentra primero. Rachid le cuenta que sus antiguos conocidos pasan de la droga a la militancia islámica, aunque ha perdido la pista de dónde se encuentran. Chacón interroga a Trinidad tras ver su salida del apartamento en la cámara de vigilancia del complejo, pero sin ninguna prueba sólida se ve obligada a dejarlo libre.
Amenazando a la ex novia de Rachid, Trinidad localiza a Rachid, a quien también amenaza. Rachid lleva a Trinidad por Madrid, donde intentan localizar a la célula terrorista islámica a la que pertenece el testigo. Mientras tanto, la célula compra y coloca una serie de bombas en un centro comercial de Madrid ocultas como extintores. Trinidad llega a su cuartel general mientras colocan las bombas. Trinidad mata a todos los terroristas, incluido el testigo, antes de que puedan detonar las bombas a distancia. Sin embargo, vuelve a ser apuñalado, esta vez mortalmente. Chacón y Leiva llegan al lugar de los hechos tras su muerte. La película termina con varias escenas de multitudes en el centro comercial, ninguna de las cuales sabe que las bombas siguen activas.