El ex policía y luchador de jaula Luke Wright gana involuntariamente una pelea arreglada, enfadando a Emile Docheski, jefe de la mafia rusa. Como castigo, el hijo de Docheski, Vassily, y sus hombres matan a la esposa embarazada de Wright, y luego prometen matar a cualquier persona con la que hable habitualmente. Luke abandona su vida y se convierte en un vagabundo sin hogar. Mientras tanto, en China, Mei, un joven prodigio de las matemáticas, es secuestrado por hombres que trabajan para el jefe de la Tríada, Han Jiao. Han desea utilizar a Mei como calculadora mental para eliminar la huella digital de su empresa criminal. La envía a Nueva York, al cuidado del brutal gángster Quan Chang.

Un año después, Han llega de China y le pide a Mei que memorice un número largo. De camino a recuperar un segundo número, su vehículo sufre una emboscada de la mafia rusa. Mei es llevada ante Emile, que le exige el número, pero Mei se niega. Antes de que puedan seguir interrogándola, son interrumpidos por la policía, enviada por el corrupto capitán Wolf, que trabaja para Han. Mei escapa durante la confusión, perseguida por los rusos hasta una estación de metro cercana, donde Luke contempla el suicidio. Al reconocer a Chemyakin, uno de los hombres que mataron a su mujer, y ver la angustia de Mei, Luke sube al tren y mata a Chemyakin y a los otros rusos. Mei huye en la siguiente parada, pero es detenida por dos detectives corruptos que trabajan para Wolf. Luke llega e incapacita a los detectives, convenciendo a Mei de sus buenas intenciones, antes de despachar también a algunos rusos.

Escondida en un hotel, Mei explica el número a Luke, que adivina que es el código de una caja fuerte con combinación. Sin embargo, Quan rastrea a Mei a través de su teléfono móvil y escapa con ella durante una distracción, mientras Luke lucha contra los hombres de Quan. Al otro lado de la ciudad, el capitán Wolf se reúne con el alcalde Danny Tremello, que se ha enterado de que Luke está involucrado. Éste advierte a Wolf, explicándole que Luke no era un policía normal, sino un sicario de operaciones encubiertas para el gobierno prestado como favor a Tremello por amigos de la CIA poco después del 11-S, junto con su antiguo compañero Alex Rosen. Luke y Alex asesinaron a varios jefes del crimen en un esfuerzo por imponer el orden, y Luke renunció después de exponer a la brigada de detectives de Wolf como policías corruptos. Luke vive una vida de exilio como expiación por las cosas que hizo para el gobierno.

Utilizando el teléfono de Chemyakin, Luke tiende una trampa a Vassily, a quien secuestra. Emile acepta a regañadientes un trato por la vida de su hijo, explicando que el número de Mei desbloquea una caja fuerte fuertemente custodiada en Chinatown con 30 millones de dólares, aunque desconoce el contenido de una segunda caja fuerte. Necesitando un equipo para llegar a la caja fuerte, Luke recluta a Wolf y a sus detectives. Juntos, luchan contra numerosos gánsteres de la Tríada para llegar a la caja fuerte. Cuando Luke está a punto de abrirla, Wolf intenta traicionarle, pero Luke mata a los detectives restantes y toma a Wolf como rehén. Con el dinero, Luke soborna a Alex, ahora ayudante del alcalde y novio, para que rescate a Mei. Alex revela que la segunda caja fuerte pertenece al alcalde y que contiene un disco con datos sobre todos los sindicatos del crimen de Nueva York. Alex se encuentra y mata a Quan y sus hombres mientras Mei observa. En otro lugar, Luke asalta al alcalde y recupera una copia del disco del alcalde.

Alex y Luke acuerdan una reunión, pero Luke se niega a entregar el dinero, sugiriendo en cambio que lo resuelvan con una pelea. Antes de que puedan empezar, Mei dispara a Alex, hiriéndolo, y Luke acaba con él. Después, Luke le da a Wolf 50.000 dólares y le ordena que devuelva a Vassily a su padre, ileso. Envía el resto del dinero a Han para comprar la libertad de Mei, amenazando con arruinar las operaciones de Han si éste intenta recuperar a Mei. Han abandona la ciudad de Nueva York disgustado, mientras Luke esconde múltiples copias del disco por toda la ciudad. Luke y Mei hacen planes para abandonar la ciudad y dirigirse al oeste, posiblemente a Seattle. Cuando Mei pregunta si finalmente están a salvo, Luke responde que se tomarán un día a la vez.