A Chun Jae-in, una huérfana convertida en detective de la policía, se le asigna un trabajo para ir de incógnito a un instituto para hacerse amiga de Seung-hee, la hija del famoso gángster Cha Young-jae, y protegerla de cualquiera de los enemigos de su padre que quieran utilizarla como cebo para conseguir que Cha Young-jae haga lo que ellos quieran, así como obtener información sobre el trabajo de su padre a través de ella. Al principio, Jae-in es muy reacia a aceptar el trabajo; sin embargo, su tío, también detective, la empuja en el último momento a aceptarlo. Jae-in es considerada una perdedora cuando entra por primera vez en su clase, y las chicas de la pandilla se enfrentan a ella después y la retan a una pelea en el patio trasero de la escuela. Jae-in, siendo una mujer policía, las vence fácilmente. Esto le hace ganarse una especie de respeto, aunque lo que Jae-in realmente quiere es la amistad de Seung-hee. Al final lo consigue con la ayuda de Kang No-young, un guapo compañero de clase y vecino de al lado que empieza a gustarle; sin embargo, Jae-in piensa que su enamoramiento está mal por la diferencia de edad.

Mientras tanto, un nuevo profesor llega a su escuela. Más tarde, Jae-in es informada de que también es un agente encubierto que trabaja para ella. Ella empieza a sospechar ligeramente de él y reconoce vagamente su cara.

Un día, después de las clases, Jae-in y otros policías descubren a Cha Young-jae a la salida de un aeropuerto; se apresuran a atraparlo, pero sus rivales también están en la persecución. Se encuentran en el aparcamiento, donde Cha Young-jae está atrapado. De repente, un misterioso motociclista se mete en medio del grupo y su moto produce humo blanco, lo que permite a Cha Young-jae escapar. Jae-in y otros policías van tras el conductor de la motocicleta, ya que Cha Young-jae ya se ha escapado. El profesor encubierto también está en el evento y dispara al conductor de la moto, pero éste se escapa. Jae-in corre tras él, pero el profesor encubierto le pone una pistola en la cabeza. Ella asume que no es grave y corre tras el conductor, pero lo único que encuentra es un reloj extrañamente idéntico al de No-young. Al llegar a casa, llama a la puerta de No-young y le pregunta por su reloj. No-young se encoge de hombros y se muestra juguetón; sin embargo, una vez que entra en su apartamento, se quita la camisa, revelando a la cámara una herida de bala. Jae-in no lo sabe, pero sospecha que No-young también está encubierto como espía.

Jae-in sospecha cada vez más de No-young, aunque sigue enamorada de él. Un día le reta a un combate de judo durante una clase de educación física en la escuela. Durante el combate, discuten a gritos, aunque ninguno de sus compañeros ni el profesor parecen darse cuenta; al final del combate, ambos conocen la verdadera posición del otro como agentes encubiertos. A partir de entonces, Jae-in le confiesa a Seung-hee que no es realmente una colegiala, lo que a su vez hace que Seung-hee se enfade mucho.

Jae-in recibe entonces una noticia: su querido tío ha sido apuñalado por un desconocido. Solloza, abrumada por el dolor de la pérdida de su única familia. La cámara la muestra entonces junto a Seung-hee en un coche con un compañero policía. El policía traiciona a Jae-in y a Seung-hee y los lleva al lugar donde Cha Young-jae ha sido capturado y se encuentra con el líder de una banda rival. No-young llega y Jae-in se une a él para luchar contra todos. Jae-in va a capturar al líder de la banda rival; sin embargo, mientras lo está esposando, le ponen una pistola en la cabeza. Se gira para ver al profesor encubierto, que se suponía que estaba de su lado. Él le revela que fue él quien apuñaló a su tío, y a ella le invade la rabia. Mientras tanto, No-young está herido y se está quedando sin energía; como espía encubierto, no puede revelarse, pues lo atraparían. Se escabulle en silencio mientras Jae-in golpea una y otra vez al profesor encubierto. Finalmente, un agente de policía esposa al profesor encubierto y se lo lleva. Cha Young-jae es enviado a urgencias en una ambulancia con Seung-hee, y Jae-in recibe la noticia de que su tío mejorará.

La película pasa a una escena en la que Jae-in vuelve a estar de incógnito. Ha pasado algún tiempo desde el caso de Cha Young-jae, aunque la película no dice específicamente cuánto tiempo. Esta vez, Jae-in está encubierta como una monja cantante. Persigue a un criminal por callejones y calles; finalmente, cuando lo alcanza, se da cuenta de que ya ha sido noqueado por alguien. Mira a su alrededor y descubre a No-young. Empieza a darle un puñetazo, pero él lo bloquea. Se reconcilian y se besan.