La actriz Georgia Hines sale de la rehabilitación por alcoholismo y vuelve a su apartamento de Manhattan y a sus amigos que la apoyan: Jimmy, un actor gay en paro, y Toby, un sofisticado miembro de la sociedad. Les dice que mantendrá su sobriedad y que poco a poco volverá a trabajar en el teatro.

Poco después, la hija adolescente de Georgia, Polly, que ha estado viviendo con su padre y su nueva madrastra, le pregunta si puede mudarse con su madre. Georgia acepta, aunque no está segura de estar preparada.

Georgia recibe una llamada de su ex amante, el escritor David Lowe, que le pregunta si pueden reunirse. Con un renovado sentido de la confianza, ella se niega rotundamente y cuelga.

Polly habla de su sufrimiento personal debido al alcoholismo de Georgia, sobre todo por no haber podido crecer con su madre.

Georgia se siente más segura, incluso llama a David para disculparse y acepta quedar con él para cenar. En la cena, David le presenta su nuevo guión, basado en su turbulenta relación llena de alcohol. Quiere que Georgia sea la protagonista. Furiosa porque David la ha llevado allí por negocios, Georgia monta una escena. Él le pide tranquilamente que lo reconsidere y ella finalmente se ríe, y se lleva el guión a casa.

El reencuentro entre Georgia y Polly resulta ser un éxito. Van de compras juntas, coquetean con chicos de edad universitaria que las confunden con hermanas, y luego cuentan alegremente su aventura a Jimmy. Le sorprenden con un número musical en el que Polly ha estado trabajando para un espectáculo escolar. En medio de su actuación, Georgia se detiene abruptamente para atender una llamada de David, dejando a Jimmy y Polly sentados en silencio.

Georgia brilla en los ensayos. Cuando confunde el arte con la vida durante una escena y pierde la compostura, David la consuela y le dice que es la única que puede hacer ese papel, besándola tiernamente en la mejilla al salir.

Georgia llega a un restaurante, felizmente tarde de los ensayos, para encontrar a Toby de mal humor. Georgia sigue hablando de la obra a pesar de que Toby le revela que su matrimonio podría estar en problemas. Jimmy llega con la gran noticia de que por fin le han dado un papel en una obra. Georgia le felicita mientras Toby mira en silencio.

En los ensayos, Georgia le lleva a David un regalo envuelto. David, sorprendido, presenta a Georgia a su nueva novia. Georgia finalmente comprende que el afecto de David hacia ella era sólo como amigo. Justo en ese momento, una desconsolada Georgia recibe una llamada telefónica de Jimmy, enterándose de que el marido de Toby acaba de pedir el divorcio. Devastados por su amigo, acuerdan reunirse en casa de Toby esa noche.

Georgia es recibida en la puerta por un Toby impecablemente vestido. Georgia sigue rellenando la copa de champán de Toby mientras éste rememora su vida como una envidiable belleza universitaria, una actriz sin talento y luego una esposa perfecta. La compostura de Toby se desmorona y cuando se excusa para retocarse el maquillaje, Georgia abre la puerta ante un tembloroso Jimmy. Inmediatamente comienza a beber champán y le revela que acaba de ser despedido de su obra, tres noches antes del estreno, después de haber invitado a toda su familia y amigos. Georgia se retira a la cocina y procede a beber varias copas de champán. Vuelve a la sala achispada y trata de reunir a sus amigos, pero los sorprende cuando se dan cuenta de que ha vuelto a beber.

Polly, ajena a los acontecimientos, llega a casa de Toby con su nuevo novio. Las tres amigas forman un plan para ocultar sus problemas a Polly, pero Georgia, ahora muy borracha, tiene una reacción exagerada hacia Polly y su cita. Polly se da cuenta de que su madre ha recaído y que Toby y Jimmy vuelven a encubrirla. Reprende a su madre por su actitud insensible hacia todos los que la rodean y se marcha con su novio.

Jimmy lleva a Georgia a casa, donde ella insiste en que Jimmy puede confiar en ella para estar sola. Después de que él se va, Georgia sale a comprar cigarrillos en un bar del barrio, pero luego se sienta para empezar a beber y entabla una conversación coqueta con un desconocido. Cuando Georgia se va, el desconocido la sigue y la arrastra violentamente a un callejón oscuro donde la golpea.

Una Georgia maltrecha y sangrando llega a casa de Toby, pero le ruega que no llame a la policía. Mientras Toby atiende el rostro herido de Georgia, ésta sigue bebiendo. Cuando Toby intenta hacerle ver lo autodestructiva que se ha vuelto, Georgia arremete contra ella y se burla. Una furiosa Toby finalmente expresa que está harta de cubrir a Georgia, diciéndole que le haga un favor a todo el mundo y deje de ser un "dolor de cabeza astronómico". Los dos viejos amigos comparten una tierna risa y un abrazo y vuelven a entrar.

A la mañana siguiente, Georgia le confiesa a Polly que no está preparada para asumir las responsabilidades de cuidar a otra persona. Polly se siente rechazada, de nuevo, por la decisión de su madre. Después de que Polly haga las maletas y se mude, Georgia empieza a aceptar el consuelo de Jimmy cuando de repente se da cuenta de que utiliza su círculo de amigos para permitir su comportamiento. La película termina con el encuentro de Georgia con Polly y el padre de ésta para comer.