Final de Sucedió una noche
(1934)
Final de Sucedió una noche (1934)
"¡Juntos por primera vez!"
Título original: It Happened One Night
Sinopsis
Peter Warren, es un periodista desempleado que se topa con Ellie, la hija de un millonario que huyó del barco de Alexander Andrews, su padre, porque no acepta al hombre con el que ella se quiere casar. Peter ve la oportunidad de conseguir una buena historia, pero varios hechos acaban por crear un vínculo entre ellos.
Frank Capra
Director
Howard Jackson
Compositor
Joseph Walker
Fotógrafo
Frank Capra
Productor
Reparto principal

Clark Gable

Claudette Colbert

Walter Connolly

Roscoe Karns

Jameson Thomas

Alan Hale
Como acaba Sucedió una noche
La heredera mimada Ellen "Ellie" Andrews se ha fugado con el piloto y cazafortunas King Westley en contra de los deseos de su riquísimo padre, Alexander Andrews, que quiere anular el matrimonio porque sabe que a Westley sólo le interesa el dinero de Ellie. Abandonando el barco en Florida, Ellie huye y se sube a un autobús Greyhound hacia Nueva York para reunirse con su marido. Conoce a otro pasajero, Peter Warne, un periodista que acaba de perder su trabajo. Pronto, Peter la reconoce y le da a elegir. Si le da la exclusiva de su historia, la ayudará a reunirse con Westley. Si no, le dirá a su padre dónde está. Ellie acepta ayudar.
A lo largo de varias aventuras, Ellie pierde su desprecio inicial por Peter y comienzan a enamorarse. Cuando el autobús se avería y comienzan a hacer autostop, no consiguen que les lleven hasta que Ellie muestra una pierna bien formada a Danker, el siguiente conductor. Cuando se detienen en el camino, Danker intenta robarles el equipaje, pero Peter le persigue y le arrebata el modelo de coche. Los propietarios del motel en el que se alojan se dan cuenta de que el coche de Peter ha desaparecido y expulsan a Ellie. Creyendo que Peter la ha abandonado, Ellie telefonea a su padre, que acepta que se case con Westley. Mientras tanto, Peter ha obtenido dinero de su editor para casarse con Ellie, pero la echa de menos en el camino. Aunque Ellie no desea estar con Westley, cree que Peter la ha traicionado por el dinero de la recompensa, por lo que acepta celebrar una segunda boda formal con Westley.
El día de la boda, finalmente le revela toda la historia a su padre. Cuando Peter llega a casa de Ellie, Andrews le ofrece el dinero de la recompensa, pero Peter insiste en que le paguen sólo sus gastos, unos míseros 39,60 dólares por los artículos que se ha visto obligado a vender para comprar gasolina. Cuando Andrews presiona a Peter para que le explique su extraño comportamiento y le exige que le diga si la quiere, Peter primero intenta esquivar las preguntas pero luego admite que quiere a Ellie y se marcha. Westley llega a su boda en un autogiro, pero en la ceremonia, Andrews le revela a su hija la negativa de Peter al dinero de la recompensa y le dice que su coche está esperando en la puerta trasera por si cambia de opinión. En el último momento, justo antes de dar el "sí, quiero", decide no seguir adelante con la boda. Ellie deja a Westley en el altar, se dirige a su coche y se aleja mientras las cámaras del noticiario dan vueltas.
Unos días más tarde, Andrews está trabajando en su despacho cuando Westley le llama para decirle que aceptará el acuerdo financiero y no impugnará la anulación. Su asistente ejecutivo le trae un telegrama de Peter: "¿Qué es lo que retrasa la anulación, lerdo? Los muros de Jericó se están derrumbando". Es una referencia a un muro improvisado hecho con una manta colgada sobre una cuerda que estaba atada a través de las habitaciones que separaban las camas en las que habían dormido, para darles privacidad a cada uno mientras viajaban juntos. Con la anulación en la mano, Andrews envía la respuesta: "Que se derrumbe".
La última escena muestra el maltrecho Modelo T de Peter aparcado en un patio de coches en Glen Falls, Michigan. Los propietarios de la cabaña hablan y se preguntan por qué, en una noche tan cálida, los recién casados (él había visto la licencia de matrimonio) querían un tendedero, una manta extra y la pequeña trompeta de hojalata que él había conseguido para ellos. Mientras miran la cabaña, la trompeta de juguete suena una fanfarria, la manta cae al suelo y las luces de la cabaña se apagan.