En la noche que Marcos le propone matrimonio a Ana, ella lo deja. Dice que necesita un descanso, pero no especifica de cuánto tiempo.

Las cosas empeoran cuando lo despiden y tiene que vivir con sus padres. Busca ayuda en Google y comienza a cuidarse, centrándose en su aspecto. Aquí es cuando conoce a Raquel, que es más libre en espíritu.

Después de pasar mucho tiempo con ella, Marcos empieza tener sentimientos por Raquel. Parte de esto es porque no tiene que fingir con ella. No tiene que controlar constantemente lo que dice cuando está con ella. Están a punto de besarse cuando aparece Ana. Raquel se da cuenta de que era con ella con quien Marcos había estado acostándose, a pesar de que le había roto el corazón, y era a ella a quien estaba tratando de superar.

Marcos se siente en conflicto con Raquel y está a punto de decírselo a Ana, pero ella le dice algo que lo deja perplejo. Resulta que se va a casar pronto. Su prometido está en Berlín, y volverá al día siguiente. Esto hace que Marcos se dé cuenta de que Ana lo había estado usando todo este tiempo. Ella no volvió porque sentía algo por él. Probablemente fue porque estaba nerviosa por su boda, y Marcos de aportó la tranquilidad que necesitaba. Ella nunca consideró que esta aventura fuera una relación, e iba a dejarlo, como lo hizo antes.

Esto le hace sentir que su cambio físico fue inútil. Por dentro, él seguía siendo la misma persona que se enamoró de la persona que no lo valoraba.

Habla con Diego sobre la situación, quien se da cuenta de que Marcos se ha enamorado de Raquel. Marcos la invita a una fiesta en la oficina para recuperarla.

Cuando Raquel llega a la fiesta, encuentra a Marcos en un armario de escobas con su jefa. Esto la lleva a creer que algo está pasando entre ellos. Él le explica que no le gusta, pero no logra convencerla. Cuando sus palabras le fallan, decide recurrir a otro gesto para demostrarle sus sentimientos. Le había dicho a Raquel que no podía bailar. También le había contado sobre el mixtape que había hecho para ella cuando estaban en la escuela, pero se había olvidado de dárselo.

Mientras tanto, también recibe un ascenso, lo que significa que tendría que ir a Londres por un tiempo. Antes de hacer eso, decide dejar todo claro con Raquel y con Ana.

En su camino al aeropuerto, hace la primera parada en la boda de Ana, donde le dice que entiende por qué lo dejó. Está saliendo cuando se da la vuelta y le dice a su esposo que ella había estado acostándose con él mientras estaba en Berlín.

La siguiente parada es en el lugar de trabajo de Raquel. Toca la canción de 500 Miles y comienza a bailar. Su acto llama la atención de los transeúntes. Cuando termina la canción, y Raquel no responde, entra y habla sobre sus sentimientos. Él dice que la ropa nueva y la nueva apariencia lo hacen sentir como una persona que no quiere ser, y se desnuda. Se podría considerar que finalmente salió de su caparazón. Hace que Raquel perdone sus dudas, y consiguen su final feliz.