Un fatídico día, en su decimoctavo cumpleaños, Woo-jin se despierta y ve una cara y un cuerpo que no son los suyos. Está muy sorprendido y confundido, se enfrenta a su madre con su nueva apariencia y ella también está sorprendida, pero con lágrimas en los ojos lo acepta como es. Con la ayuda de su madre (Mun Suk) y de su mejor amigo (Song-beck), Woo-jin es capaz de enfrentarse a su extraña condición. Desde ese día, Woo-jin, ahora diseñador de muebles, se despierta en un cuerpo diferente cada día, sin importar la edad, el género o la nacionalidad. A veces es un hombre, una mujer, un anciano, un joven o incluso un extranjero. Incluso puede hablar diferentes idiomas, dependiendo de quién sea ese día. Es la misma persona por dentro, pero por fuera siempre es alguien nuevo. Ver una cara diferente en el espejo cada mañana es difícil para él acostumbrarse.

Cada mañana, Woo-jin se graba a sí mismo en su ordenador, para saber quién es ese día. Y cada mañana tiene que acostumbrarse a los cambios de ser una persona diferente. Tiene que ajustarse a su nuevo cuerpo, vista, voz, etc. Después de muchos años de transformarse en personas diferentes, Woo-jin ha ideado un sistema en el que tiene todo tipo de ropa y zapatos que se adaptan a cualquier tipo de cuerpo y, por supuesto, diferentes tipos de artículos de aseo dependiendo de si es hombre o mujer. También tiene un foróptero para comprobar su visión y un medidor de pies Brannock para medir sus pies y así poder elegir los zapatos de la talla adecuada.

Como diseñador de muebles, Woo-jin puede trabajar en la intimidad de su casa y evitar que los demás descubran su secreto. Es dueño de una empresa de muebles llamada ALX que se especializa en muebles hechos a mano y diseñados para cada cliente. Su mejor amigo Song-beck trabaja con él, encargándose de las ventas y yendo a conocer a los clientes de Woo-jin en persona.

Un día, Woo-jin se enamora de una mujer llamada Yi-soo que trabaja en una tienda de muebles. Comienza a visitarla todos los días para verla y de vez en cuando hablar con ella, pero ella no se da cuenta porque él llega como otra persona cada día. Él espera hasta el día adecuado en el que es alguien guapo (Park Seo-Joon) para finalmente acercarse a ella y pedirle una cita. Consigue invitarla a salir y quiere seguir viéndola como la misma persona. Como resultado, pasa varios días sin dormir para seguir siendo la misma persona que salió por primera vez con Yi-soo. Inevitablemente, no consigue mantener el mismo cuerpo debido a la falta de sueño y decide dejar de contactar con Yi-soo porque no quiere revelarle su secreto. Sin embargo, Yi-soo decide visitar a Woo-jin en su casa un día y descubre su secreto. Ella está sorprendida y le lleva algún tiempo comprender y aceptar a Woo-jin por lo que es en su interior.

Permanecen juntos e idean un plan para reunirse cada vez que Woo-jin se transforme. Cuando Woo-jin agarre la mano de Yi-soo, ella sabrá que es él. O al menos esa es la idea. Yi-soo, después de un tiempo empieza a tener dificultades con su relación. Nunca sabe realmente quién es Woo-jin y tiene que confiar plenamente en que el extraño que le agarra la mano es Woo-jin. La gente empieza a cotillear sobre Yi-soo, diciendo que siempre sale con diferentes hombres. Esto la lleva a un punto de ruptura en el que confía en la medicación para poder hacer frente a su estrés, ansiedad e insomnio. Para ayudarla, Woo-jin decide desaparecer de su vida. El tiempo pasa, pero Yi-soo nunca deja de querer a Woo-jin y está decidida a encontrarlo.

Yi-soo consigue encontrar a Woo-jin una vez más en un país diferente (la República Checa). Le confiesa que aún le ama y que quiere pasar su vida con él. Tras esta confesión, Woo-jin le propone matrimonio a Yi-soo y ella acepta.