Devon (Justin Bruening) es un prometedor youtuber que hace vídeos falsos sobre apariciones de monstruos. Tiene la idea de crear una serie en su canal para encontrar y entrevistar a monstruos reales poniendo un anuncio en Craigslist. Bryan (Toby Hemingway), amigo de la infancia de Devon, pasa una temporada en casa de éste para que termine su recuperación de su adicción a las drogas. A pesar de consumir drogas en secreto, le invitan a participar en el proyecto junto al cámara Jamal (Jamal Quezarie).

La pareja encuentra tres candidatos para filmar para el canal: Steven (Steven Flores), un agente de policía que dice ser un cambia pieles; Shayla (Yvonne Zima), una misteriosa artista del tatuaje que dice ser un vampiro, y Shiori (Shiori Ideta), una joven asiática que dice estar atormentada por posesiones demoníacas. Devon contrata a Murielle (Murielle Zuker) para que dirija su documental y a Bryan para que sea su ayudante. El equipo alquila una casa abandonada para reunir a las criaturas. El dueño de la propiedad les revela que allí se han celebrado rituales satánicos en el pasado, lo que no intimida a Devon.

Tras comenzar a instalar su equipo en la casa, Devon muestra algunos artefactos vinculados a la mitología de cada monstruo, con la intención de utilizarlos si es necesario. Se revela que lleva balas similares a las de plata para el skinwalker. El rodaje se realiza en la noche de un eclipse lunar. Las entrevistas se llevan a cabo, pero las cosas empiezan a torcerse cuando Shayla revela que Bryan sigue consumiendo drogas, lo que desencadena una pelea entre el grupo. Cuando Steven desaparece y se produce el eclipse, oyen unos gruñidos bajos e investigan hasta que encuentran a un Steven ya convertido en una habitación. El skinwalker los ataca hasta que lo encierran en una habitación, hiriendo a Jamal en el proceso.

Tienen un breve encuentro con Shiori poseída por el demonio antes de huir de ella hacia el ático. Shayla aparece en su forma de vampiro y ataca a Murielle, mordiéndole el cuello y llevándola rápidamente al ático. Jamal los salva de un ataque, empalando fatalmente a Shayla con una estaca en el corazón. Tras comprobar que todas las puertas y ventanas están cerradas sobrenaturalmente y que el cambiapieles es libre de atacarles, el grupo se esconde en el sótano. Al descubrir que Shiori está allí, no en su forma demoníaca, intentan urgentemente encontrar una salida antes de que vuelva a ser poseída. Bryan consigue finalmente encontrar una salida, pero es detenido por una sombra con máscara de calavera frente a él. Shiori vuelve a ser poseída y ataca a Bryan antes de ser retenida y de que se realice un exorcismo. Cuando el demonio posee temporalmente a Murielle, revela su nombre: Baphomet. Shiori es asesinada en el pentagrama y Jamal comienza a sentirse mal por la herida que parece empeorar cada vez más. El skinwalker aparece y muerde fatalmente a Jamal, obligando al trío superviviente a huir del sótano.

Se encierran en una habitación, separándose de Devon. Murielle comienza a sentirse mal y a vomitar sangre, donde poco a poco se transforma en un vampiro. Bryan es atacado por ella, pero consigue matarla con una estaca en la cabeza en defensa propia. Consigue escapar de la casa cuando es arrojado desde el segundo piso por la skinwalker y se refugia en una cabaña abandonada cercana. Descubre varios símbolos extraños y monitores que registran todo lo ocurrido en la casa esa noche. El cambia pieles invade el lugar, pero es empalado por una lanza que encontró Bryan y muere. Se revela entonces que Devon planeó todo esto, ya que participa en una secta demoníaca y la criatura con cabeza de cabra es una fantasía de uno de los miembros del grupo malvado. Bryan es atado a una silla y obligado por Devon a participar en un ritual para invocar a una poderosa entidad, que probablemente será Baphomet. Los cuerpos de Steven, Shayla y Shiori y sus víctimas están en un pentagrama con Bryan. Después de dar su sangre al ritual, una sombra con cuernos y alas aparece de la pared, rugiendo fuertemente antes de que la cámara deje de grabar.